La desaparición del submarino Titán el pasado domingo, que iba en una misión para visitar los restos del Titanic en el Oceáno Atlántico, generó preocupación a nivel mundial.
Tras darse a conocer esta noticia, el nombre de Alan Estrada empezó a resonar en redes sociales ya que es uno de los mexicanos que llegó a ver lo que queda actualmente del famoso naugragio, ocurrido en 1912, y quien dejó registro de su viaje en redes sociales.
Sin embargo, no es el único compatriota en haberlo hecho: Renata Rojas es otra de las mexicanas que tuvo la oportunidad de sumergirse en el fondo del océano para visualizar el barco más famoso de la historia con la misma empresa: OceanGate.
Renata Rojas contó cómo fue su visita a los restos del Titanic
La historia de Renata Rojas y su amor por el mar inició desde que tenía 12 años, cuando su papá le daba clases de buceo en la península de Yucatán, de acuerdo con declaraciones que hizo en un programa llamado Exploring By The Seat Of Your Pants.
Su misión para ver los restos del barco fue similar a la de Alan Estrada: intentó hacer un viaje hace algunos años, pero por distintas cuestiones no se concretó, y fue hasta el 19 de julio de 2022 que la mujer originaria de Cozumel logró ver los restos del Titanic.
“En 2019 iba a ser mi primera expedición con OceanGate, esa expedición se tuvo que posponer por el COVID y finalmente pude ir en 2022″, señaló.
Después de muchos años de soñar con aquel momento, Rojas pudo cumplir su sueño gracias al sumergible Titán, en el que también viajó.
“Como especialistas (...) formamos parte de cada aspecto de la expedición, después de sumergirnos pudimos ver el increíble Titanic, así luce ahora. Usamos cámaras de 8k y esta es el ancla del Titanic, nunca se había tomado de tan cerca”, compartió.
Renata Rojas habla sobre los riesgos y retos de viajar en el submarino
De acuerdo con Renata, quien ofreció la entrevista en 2022, aseguró que Titán era el primer sumergible hecho con fibra de carbono, por lo que cada una de las expediciones tenía riesgos, mismos que la tripulación debía aceptar para realizar el viaje.
“Cuando fui por primera vez no tenía miedo, los sumergibles son muy seguros, si hay un problema hay formas de salir. Puedes quedar atrapado por 24 horas, pero hay formas para estar estable durante ese tiempo”, detalló.
No obstante, también señaló que existen algunos factores que pueden jugar en contra de la tripulación, como el clima.
“Se sabe que no se puede poner el sumergible en el agua si el clima no está cooperando, ya que hay muchas corrientes y tú estás cayendo. Las corrientes te pueden llevar a cualquier área, entonces necesitas aterrizar cerca del Titanic”, explicó.
“Cuando estás adentro es básicamente como si estuvieras en un avión, sientes una gran presión, estas dentro de una atmósfera y tienes esa gran vista de frente que te deja ver el Titanic”, compartió.