Las versiones sobre la salud de Carmelita Salinas se contraponen; mientras que su ahijado Jorge Nieto asegura que declararon un daño irreversible tras el derrame cerebral de la actriz, su sobrino y su hija negaron dicha información.
“Fueron tres neurólogos los que visitaron a Carmen y todos coinciden que el derrame causó daños irreversibles. Lo que nos están diciendo es que ya no va a despertar, pero estamos esperando un milagro, todo podría pasar”, confesó Nieto a la periodista Azucena Uresti.
En contraparte, tanto su sobrino Gustavo Briones como su hija María Eugenia Plascencia negaron que el diagnóstico de los médicos hacia Carmelita haya sido que ya no volverá del coma o que tenga un daño irreversible tras el derrame cerebral.
“Lo único que nos han dicho es que hay que esperar”, comentó Briones la noche de este viernes a los periodistas que se dieron cita a las afueras del nosocomio privado, como César Huerta. “Checaron los estudios y están haciendo todo lo posible con medicinas y con un montón de cosas”, apuntó su hija.
Ambos familiares han relatado que cuando acceden a la sala donde Salinas se encuentra en estado de coma le han hablado porque los médicos afirmaron que el oído es de los órganos más fuertes. En su momento, Gustavo Briones expresó que pudo notar un ligero movimiento de su barbilla; ahora, su hija aseguró que movió los pies. Sin embargo, los médicos siguen haciendo los estudios necesarios para clarificar la situación de la exdiputada.
Recientemente, el productor Nicandro Díaz dijo a People en Español una inusual petición que le hizo Salinas para ausentarse de las grabaciones de la telenovela Mi fortuna es amarte el pasado 8 de noviembre, cuatro días antes de caer en coma: acudir a su notario para cambiar su testamento.
Aunque ya contaba con el documento, la actriz tenía pendiente actualizar la información en la repartición de la casa en donde vive y su estudio, que pensaba dejar a su hija María Eugenia y sus nietas, hijas de Pedro Plascencia (quien falleció a causa del cáncer), respectivamente.