El actor Kevin Spacey, quien fuera despedido de la serie de Netflix House of Cards derivado de las denuncias por acoso sexual en su contra, perdió en 2020 un juicio en donde se le ordenó pagar al estudio de producción MCR la cantidad de 31 millones de dólares para resarcir las pérdidas millonarias tras su salida como Frank Underwood.
La productora aseguró que Spacey violó los códigos de conducta de su contrato y que, como consecuencia, su salida para la temporada seis le trajo pérdidas al tener que reducir de 13 a 8 episodios su temporada final. Ante ello, los abogados del actor presentaron ante el tribunal un documento en donde alegan que al filmar el proyecto no actuó de manera inapropiada, por lo que buscan que se anule el monto que debería ser saldado tanto por el actor de 62 años como por sus compañías M. Profitt Productions y Trigger Street Productions.
“La verdad es que aunque Spacey participó en una cultura generalizada en el set que estaba llena de insinuaciones sexuales, bromas y payasadas inocentes, nunca acosó sexualmente a nadie. Como la evidencia estableció y el árbitro reconoció en el laudo, las pocas veces que se le dijo a Spacey que su conducta hacía que alguien se sintiera incómodo o que de alguna manera no era deseado, se detuvo”, se expresó en el documento en poder de Variety.
A su vez, la defensa argumentó que la reducción de episodios fue una conclusión inevitable una vez que Netflix estipuló que Spacey no sería parte de la temporada. “Pero lo que el árbitro ignoró es que Netflix ni siquiera conocía la conducta que consideró que incumplía los acuerdos en el momento en que tomó esta decisión. En otras palabras, los incumplimientos no podrían haber estado relacionados con los demandantes porque esos daños ya habían sido causados en el momento en que se conoció la conducta infractora”, agrega el texto.
En 2017, el actor de Star Trek, Anthony Rapp, fue el primero en pronunciarse públicamente en contra de Spacey al acusarlo de hacerle insinuaciones sexuales inapropiadas cuando tenía 14 años.