Los 70 años en los que la reina Isabel II ha estado al frente de la monarquía, consolidando uno de los reinados más largos en la historia, dejan a la soberana de 95 años con una gran fortuna, además de propiedades históricas, algunas de ellas heredadas, y un patrimonio de costosas joyas y autos clásicos.
Recientemente se ha informado que la reina se recupera de síntomas leves por COVID-19, luego de que cancelara algunos encuentros virtuales, por lo que el Reino Unido se ha preocupado por el avance de su salud y las teorías sobre una posible muerte no se han hecho esperar.
¿De cuánto es su fortuna?
Recientemente, el London Times Rich estimó que la fortuna de la Reina Isabel II asciende entre los 500 y 600 millones de dólares, aunque la cantidad no es definitiva ya que antes debe pasar por la Lista Civil, que administra sus recursos desde que fue establecida por el rey Jorge III en 1760.
De acuerdo con Forbes, el patrimonio total de la familia real es cercano a los 88 mil millones de dólares. Según el informe de la empresa Statista, también se trata de la quinta marca más conocida del mundo detrás de Facebook, Amazon, Google y Apple. Su valor por sí misma superaría los 45 millones de dólares.
¿De dónde provienen sus ingresos?
La soberana británica cuenta con una fortuna que además de los dólares en sus cuentas abarca históricas propiedades y las joyas de la corona. Son tres sus principales fuentes de ingresos como el pago anual de la Subvención Soberana (una cantidad anualmente que paga sus obligaciones y los costos de los eventos oficiales y propiedades reales, que en 2020 fue de más de 114 millones de dólares), el Privy Purse (proveniente del Duchy of Lancaster) y sus bienes personales.
Entre estos últimos se encuentran las propiedades heredadas por su padre, que son el Balmoral, que fue adquirido por la reina Victoria en 1848, y la finca de Sandringham. En tanto, su madre le dejó al morir la cantidad de 70 millones de libras, unos 93 millones de dólares. Asimismo, tiene en su poder las joyas de la corona que, aunque no pertenecen a ella, sí a la monarca en turno.
En cambio, dentro de su colección personal con un valor aproximado de 10 millones de dólares, cuenta con piedras preciosas en anillos, tiaras, collares y aretes. A ello se le suma una colección de automóviles clásicos que está estimada con un costo cercano a los 15 millones de dólares.