Después de un mediático juicio con récord de espectadores contra su exesposa Amber Heard, ahora Johnny Depp debe enfrentar otro proceso legal, aunque ya no en Virginia sino en Los Ángeles, en donde se espera que suba nuevamente al estrado luego de que Gregg ‘Rocky’ Brooks lo demandara civilmente por golpearlo en el set de la película City of Lies.
Aunque el veredicto de los jueces favoreció al actor de Piratas del Caribe, de acuerdo con el New York Post Depp, de 58 años, volvería a testificar el próximo mes (25 de julio) en el Tribunal Superior de Los Ángeles luego de los más de cuatro días que lo hizo mientras exponía que nunca violentó a la actriz de Aquaman. Su defensa, encabezada por Benjamin Chew y Camille Vasquez, estará a su lado.
La demanda de Gregg ‘Rocky’ Brooks
En 2018, Gregg ‘Rocky’ Brooks –quien se desempeñó como gerente de locación del thriller policial que se basó en la investigación de los asesinatos de Tupac Shakur y The Notorious B.I.G– aseguró que Depp supuestamente lo golpeó en dos ocasiones en la caja torácica. Según su versión, los hechos ocurrieron el 13 de abril de 2017.
Brooks afirma que los ánimos se calentaron porque le expresó al actor y al director Brad Furman que una escena no estaba funcionando, por lo que fue a buscar a un policía luego de que el histrión le gritara que le daría 100 mil dólares si lo golpeaba.
Recientemente, el abogado de Brooks, Pat Harris, explicó al diario The Sun que respetaba la decisión en Fairfax, pero que este proceso es diferente por lo que el resultado allá no tendrá ninguna relevancia.
“El caso de Brooks no se trata de dos celebridades de Hollywood involucradas en una relación tóxica, se trata del asalto a un trabajador miembro del equipo de filmación por parte de la estrella de la producción. El señor Brooks espera con ansias su día en la corte”, señaló.