Este 11 de marzo el primer actor, Ignacio López Tarso, falleció a los 98 años tras una semana de permanecer convaleciente en terapia intermedia.
El protagonista de Macario, primer película mexicana nominada en los Oscar, fue internado en un hospital de la Ciudad de México debido a una oclusión intestinal y complicaciones de neumonía.
Pese a que el histrión se mantenía estable, Juan Ignacio Aranda, hijo del actor, informó a medios el pasado viernes que López Tarso ya presentaba problemas renales y cardiacos; además mencionó que ya no podía comer ni hablar.
Aún así el también actor se mostró optimista respecto a la fortaleza que su padre había mostrado durante toda su vida.
Ignacio López Tarso y sus deseos de cumplir el centenario de vida
El actor nonagenario construyó una carrera polifónica pues su maleabilidad en distintos ámbitos de la actuación le abrió las puertas en decenas de películas, telenovelas y obras de teatro.
Si bien López Tarso se mantuvo activo en varios proyectos hasta inicios de 2023, en el marco de su cumpleaños número 98, el histrión expresó que aún tenía mucho que ofrecer en la escena mexicana y comentó en una entrevista para Excélsior que deseaba llegar a los 100 años.
“Estoy totalmente en paz, agradecidísimo por todos estos años de vida, porque me sigue gustando mucho vivir y quiero, en dos años más, llegar y celebrar 100 años, en 2025″, aseguró el protagonista de El Gallo de Oro, filme basado en un cuento de Juan Rulfo.
En dicha conversación, el actor dijo que se sentía bien de salud y que se enfocaba en el cuidado de su salud; asimismo señaló que su memoria y su cerebro se encontraban en óptimas condiciones.
Sin embargo, entre las declaraciones, Ignacio López Tarso señaló que deseaba seguir trabajando en proyectos de cine y televisión.
Para el actor de El Hombre de Papel, las oportunidades y posibles proyectos eran un aliciente; no obstante, confesó que las propuestas cada vez eran menos frecuentes.
“Me gusta seguir viviendo y aprovecharé todas las oportunidades que lleguen, aunque han ido reduciéndose hasta llegar a no hacer cine, a casi no hacer televisión”, dijo en la entrevista el ganador de dos Arieles.
El ímpetu de López Tarso se reflejó hasta sus últimos proyectos en teatro virtual y algunas grabaciones para series de televisión, como Vecinos, proyecto en el que compartió créditos con Sergio Corona.
López Tarso no consideraba que su edad fuera un impedimento para seguir ejerciendo la actuación y apelaba a la lucidez de la que gozaba.
“Yo estoy muy activo mental y físicamente, puedo hacer cualquier personaje de mi edad”, destacó el actor de El Profeta Mimí.