El actor Gary Sinise, querido por personificar al ‘Teniente Dan Taylor’ en Forrest Gump, pasa por momentos complicados luego de la muerte de su hijo McCanna Anthony Sinise a los 33 años.
“Tuvimos la suerte de tenerte en nuestras vidas como hijo, hermano y amigo... y te extrañaremos y te amaremos por la eternidad”, escribió el actor en una carta que compartió para rendirle homenaje.
¿Qué le pasó al hijo de Gary Sinise?
Mac, así lo conocían cariñosamente, murió el 5 de enero pasado debido al cáncer que le fue diagnosticado en agosto del 2018, pero su padre decidió comunicarlo hasta ahora. Precisamente el año en el que a la esposa de Gary le detectaron cáncer de mama.
Sinise describe que la noticia de ambos padecimientos al mismo tiempo se sintió como “un auténtico puñetazo en el estómago”.
Su esposa Moira pasó por meses de tratamiento para la remisión del cáncer de mama en etapa 3 y dio resultado, desde entonces no ha recaído. Sin embargo, durante estos años acompañaron a su hijo en una “larga batalla” contra el cordoma.
El principal obstáculo para la familia fue la falta de información sobre esa rara forma de cáncer. Cuando hallaron Chordoma Foundation, la organización que los respaldó, crearon un grupo para reunir mensajes de aliento y sobre todo, recursos para la investigación de una cura.
La salud de Mac se fue deteriorando poco a poco, tuvo que pasar por varias cirugías, pero el cáncer regresó y se extendió tras el primer procedimiento.
En el tramo final de su vida, sufrió parálisis del pecho hacia abajo y apenas podía usar los brazos, pero hacía música desde su cama. Mac tocaba la batería desde los 9 años, así que el empuje para seguir fue la creación de un álbum musical que precisamente quedó listo en la semana de su muerte.
“Luchó una dura batalla contra un cáncer que no tiene cura, pero nunca dejó de intentarlo”, escribió Gary Sinise, también conocido por su papel del ‘detective Mac Taylor’ en C.S.I. New York, tras el proceso de cinco años y medio que pasaron junto a su hijo.
¿Qué es el cordoma?
Sinise explicó que en un primer momento acudió a internet para entender lo que le sucedía a Mac: “El cordoma es un cáncer que ocurre uno entre un millón. Originado en la columna vertebral, el cordoma afecta, en promedio, sólo a 300 personas por año en los EE. UU.”.
De acuerdo con los datos que recabó: “En el 70% de los casos el tumor inicial se puede extirpar y curar. Pero en el 30% de los casos, quizás unas 90 personas por año, el cáncer regresa”. Su hijo fue parte de ese porcentaje que no logra librarse del cáncer.
El Instituto Nacional del Cáncer de los Estados Unidos apunta que el cordoma es muy difícil de detectar en el tejido interno de la columna. La enfermedad avanza de forma lenta y silenciosa, por lo que la mayoría de las personas es diagnosticada entre los 50 y los 70 años.
La misma fuente resalta que la parte principal del tratamiento es la extirpación del tumor y posteriormente, la radioterapia. Sin embargo, la complicación de estas cirugías está en evitar el daño a las partes sanas del cuerpo, como los nervios y los vasos sanguíneos.