Myra Milanszenko, madre de Erik Rubín, falleció tras enfrentar una complicada situación de salud. El cantante de Timbiriche compartió la noticia en sus redes sociales acompañada de un emotivo mensaje en Instagram.
Erik Rubín, hijo único de Myra Milanszenko y José Ángel Rubín Lozano, expresó su despedida con estas palabras: “No me pararé al lado de tus cenizas a llorar. No estás ahí, no duermes. Eres una milla de vientos que soplan y sostienen las alas de los pájaros”, escribió en su perfil de Instagram.
¿Quién fue Myra Milanszenko, mamá de Erik Rubín?
Joannine Myra Milanszenko Daugherty nació en 1951 y falleció a los 73 años tras enfrentar problemas de salud relacionados con un tumor pulmonar.
Estuvo casada con José Ángel Rubín, de quien se divorció años después. Myra llevaba una vida personal discreta y no era activa en redes sociales. Sin embargo, su perfil de Instagram incluye una fotografía con Erik Rubín y un enlace a una página de Facebook relacionada con la renta de departamentos.
Andrea Legarreta, expareja de Erik Rubín, la describió como una mujer llena de energía y alegría: “Es divertida, gozosa, una mujer de alma muy libre”, mencionó la conductora del programa Hoy.
¿Quiénes son los hermanos de Erik Rubín?
Aunque Erik Rubín fue el único hijo de Myra Milanszenko, tiene tres hermanos por parte de su padre, José Ángel Rubín. Los hermanos se llaman: José Ángel Rubín, Gabriela Rubín e Iván Rubín.
Los hermanos del cantante han mantenido su vida privada fuera del foco mediático; sin embargo, Gabriela Rubín ha compartido momentos familiares a través de su perfil de Instagram, como fotografías en estrenos de sus obras teatrales.
En una publicación, escribió: “Sin duda lo mejor que me ha regalado la vida… los amo con el alma. Feliz día del hermano”.
Problemas legales de José Ángel Rubín
Uno de los hermanos de Erik Rubín fue detenido por un presunto fraude genérico, según información del periódico Reforma.
El hermano del cantante fue acusado de vender un auto con reporte de robo. Aunque fue investigado por la policía de Puebla, al no ser considerado un delito grave, pudo obtener su libertad tras pagar una fianza.