Guadalajara, Jal.- El gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, niega que en carreteras de Jalisco existan retenes del crimen organizado e instó a que el cardenal José Francisco Robles Ortega presente su denuncia formal, y no deje en la mera declaración a medios de comunicación el haber sido retenido por supuestos delincuentes.
El mandatario fue enfático en que los cuerpos de seguridad son quienes tienen el control de las carreteras y vías de comunicación, “en el estado de Jalisco no hay ningún tipo de retén de grupos criminales en las carreteras, en este estado está garantizada la libertad de tránsito”.
Agregó que ya se registró un contacto con el prelado para hablar al respecto; “el día de ayer el secretario general de Gobierno se comunicó con el señor Cardenal, a quien le tenemos un profundo respeto; nos extraña mucho que se haya hecho una declaración mediática y no una denuncia formal en su momento. El día de hoy en la mañana, en la mesa de seguridad, se volvió a hacer una consulta con todas las instancias de seguridad, federales, estatales y municipales, y no hay ni un solo punto en el que haya algún tipo de retén”.
Alfaro reconoció la presencia de grupos criminales en diversos municipios del estado, pero dijo que ese es un tema en el que se trabaja con el Gobierno Federal todos los días; “por supuesto que al señor Cardenal le ofrecimos, y le ofreceremos siempre disposición para atender cualquier tema que le preocupe a la iglesia católica, o a cualquier iglesia de este estado. Estamos para mantener la comunicación, pero creo que es muy importante hacer un llamado a hablar las cosas con cuidado, y sin buscar generar una alarma en un asunto que me parece se debe de analizar en su justa dimensión”.
Robles Ortega y el obispo de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló, denunciaron haber sido víctimas de retenes del crimen organizado en municipios localizados en los límites de Jalisco y Zacatecas, además que el arzobispo de Guadalajara denunció que en la demarcación se debe pedir anuencia de líderes delincuenciales para celebrar las fiestas patronales y pagarle la mitad de los ingresos.
Por su parte, el presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, Alfonso Hernández Barrón, denunció públicamente que los integrantes de células delictivas en la zona norte de la entidad han coaccionan y extorsionan a los miembros de la comunidad wixarica.