El gobernador de Nayarit, Miguel Ángel Navarro Quintero mostró fotografías de la casa que habitarán médicos cubanos en la cabecera municipal de Del Nayar, en Jesús María, uno de los municipios más pobres del país.
“La casa que habitarán los médicos cubanos comisionados por el Gobierno de México al hospital de Jesús María ya está lista, después de un mejoramiento integral. Los hombres y mujeres que cuidan de nuestra salud contarán con un espacio digno, no lujoso, para habitar mientras estén sirviendo al pueblo de Nayarit.”, estableció el mandatario.
El municipio de Del Nayar, según Coneval -última medición de 2020- tiene un grado muy alto de marginación y rezago social; 46,005 personas están en situación de pobreza. De sus 47,550 habitantes en total, el 87% carece de servicios básicos en su vivienda; el 72% no puede acceder al drenaje en sus viviendas y el 69% usa leña para cocinar.
Según la Dirección de Padrones de Beneficiarios de la Secretaría de Bienestar, existen 17 unidades médicas del IMSS bajo el régimen Bienestar.
¿Qué especialidades cubrirán los médicos cubanos?
Estas son las 15 especialidades con alta demanda que cubrirán los médicos cubanos en Colima y Nayarit:
- Medicina interna
- Pediatría
- Cirugía general
- Ginecología y obstetricia
- Urgencias
- Terapia intensiva
- Imagenología
- Anestesiología
- Nefrología
- Angiología y cirujía vascular
- Dermatología
- Hematología
- Medicina física y rehabilitación
- Ortopedia y traumatología
- Odontorrinolaringología
Los especialistas validaron estudios y conocimientos ante la SEP para que pudieran laborar en México, indicó Robledo.
Tras los cuestionamientos sobre la rapidez inusual con la que se tramitó la validación, el funcionario afirmó que el lapso está establecido en el convenio ratificado con Cuba y no debería ser motivo de preocupación.
“Una revalidación puede tomar meses, sí, pero la salud de la gente debe de tomarnos horas para poderla atender, eso es lo que nos debería preocupar, no cuánto tarda un trámite administrativo sino cuánto debe de tardar y cuánto tiempo es clínicamente aceptable para la atención”.