Para “celebrar” la llegada de Año Nuevo, el director de Obras Públicas del Ayuntamiento de Tampamolón Corona, San Luis Potosí, Hermes Sánchez Cano, junto a otras personas, detonaron disparos al aire, con una arma AK-47, mejor conocida como “cuerno de chivo”.
La Fiscalía General del Estado ya investiga el hecho y los funcionarios involucrados ya fueron cesados.
La presidenta municipal, Silvia Medina Burgaña, aseguró que no tolerará que los funcionarios de su Ayuntamiento ejecuten conductas que pongan en riesgo a la ciudadanía.
En redes sociales se difundió un video donde se aprecia al funcionario con el arma de alto calibre y de uso exclusivo del Ejército Mexicano. Este acto es considerado delito y se castiga de cuatro a 15 años de cárcel y multa económica.
“Brindar seguridad a las familias es el mayor de nuestro gobierno municipal, por ello no toleraremos actitudes peligrosas de nuestros servidores públicos”, expresó Medina Burgaña.
En breve la presidenta municipal nombrará a la persona que ocupe la dirección municipal, que aún está acéfala.
El Fiscal General, José Luis Ruiz Contreras, informó que inició una investigación para deslindar responsabilidades por los delitos en los que hubiera incurrido el funcionario.
Recordó, que la portación de esta arma es prohibida y además de que la irresponsabilidad del funcionario puso en peligro la vida de la ciudadanía.
Por su parte el Secretario General de Gobierno, Guadalupe Torres Sánchez, sostuvo que el funcionario incurrió en un delito, por lo que exhortó a la alcaldesa a que tome cartas en el asunto.
“La manipulación del arma es un ilícito que no se va a dejar pasar ni a un funcionario ni a nadie. De manera institucional y respetuosa hacemos un llamado a la presidenta municipal, Silvia Medina Burgaña, que revise la conducta de todos sus funcionarios”.