La reconstrucción del puerto de Acapulco, luego del devastador paso del huracán Otis, costará alrededor de 270 mil millones de pesos, una cifra que equivale a 13.5 veces del recurso disponible en los fondos de emergencia, afirma el vicepresidente de El Financiero, Enrique Quintana.
La semana pasada, el modelador de desastres de Enki Research estimó un impacto económico en el puerto de 10 mil a 15 mil millones de dólares, más pérdidas adicionales porque la temporada alta de turismo en la región es de diciembre a marzo.
Tomando como referencia este dato, Quintana advierte que los trabajos de reconstrucción rebasarán por mucho los recursos disponibles del Gobierno Federal. Si bien es cierto que este no deberá cubrir la totalidad del monto, los gastos estimados para las aseguradoras, hasta ahora, no llegan ni a la mitad de lo que se requiere.
El presidente del Comité de Convenios de la Asociación Mexicana de Agentes de Seguros y Fianzas (AMASFAC), Fernando de la Torre, indicó en entrevista para El Financiero que el monto a pagar por las aseguradoras no superará los 2 mil 675 millones de dólares que dejó el huracán Wilma debido a la baja penetración del seguro en el estado.
“Aunque sí podemos esperar daños materiales comparables en general, o incluso mayores, hay una gran distinción, Cancún es una de las zonas más aseguradas o donde hay más cobertura de los activos y de las personas en México, mientras que en general el estado de Guerrero, incluyendo Acapulco, no tiene ese mismo nivel de penetración ante falta de cobertura de activos”, precisó.
Esto quiere decir que las aseguradoras apenas y cubrirán el 17.8 por ciento de los daños, según los datos proporcionados hasta ahora.
A esto se suman los recursos que deberán destinarse a la atención de las necesidades esenciales de la población afectada, así como de la reparación de infraestructura fundamental, como por ejemplo, la provisión de energía eléctrica, las telecomunicaciones o los caminos.
De acuerdo con Quintana, el Fondo de Desastres Naturales (Fonden), que sí existe aunque ya no como fideicomiso, cuenta en principio con 11 mil 758 millones de pesos que resultan de los 17 mil 156 millones que le fueron asignados en el Presupuesto del 2023 menos 5 mil 398 millones que fueron usados en los primeros seis meses del año.
Adicionalmente, hay un seguro contratado cuya prima costó 1 mil 773 millones de pesos y que libera recursos del orden de 485 millones de dólares.
Es decir, hay disponibles para girarse poco más de 20 mil millones de pesos, con los que se puede atender la emergencia, según estima.
Además, el Gobierno deberá contemplar recursos para generar fuentes de ingresos que beneficien a la población afectada.
En algunos casos, los hoteles podrán emplear a su mismo personal para apoyar en la reconstrucción, pero si esto no se logra, un esquema de trabajos temporales financiado por el gobierno sería algo ideal para no dejar desprotegidos económicamente a los habitantes del puerto, señala Quintana.