El fiscal general del estado de Jalisco, Luis Joaquín Méndez, informa que los celulares de los cinco jóvenes desaparecidos en agosto pasado en Lagos de Moreno, fueron localizados por parte de elementos de la Guardia Nacional, pero considera que fueron dejados en el sitio por una persona ajena a las investigaciones.
Una llamada anónima alertó a las autoridades sobre los ‘teléfonos de personas desaparecidas’, además de ‘otros indicios’ en el predio donde fueron fotografiados los cinco amigos de Lagos de Moreno antes de que fueran victimados, el terreno previamente fue revisado.
Los agentes de la corporación federal encontraron los aparatos dentro de una caja que estaba en un rincón, cubierta con fierros y ladrillos.
Éstos eran propiedad de Roberto Olmeda, Diego Lara, Uriel Galván, Jaime Martínez y Dante Cedillo, y estaban en la finca de la colonia Orilla del Agua, que fue asegurada por la fiscalía, en la cual se apreciaban pintas que aludían al control que ejerce el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Dentro del predio, en una especie de esquina, presuntamente se tomaron las fotografías que circularon en redes sociales. En ellas se muestran a los cinco jóvenes maniatados y con los ojos vendados
Los peritos del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses analizan el contenido de los celulares y continúan con la identificación de los restos que fueron encontrados en la ladrillera de la zona conocida como El Bajío, los cuales podrían corresponder a los jóvenes.
Existe la versión de que los jóvenes se negaron a participar en los trabajos de un call Center, presuntamente operado por el CJNG. Sobre el caso hay cinco personas detenidas, y vinculadas a proceso.