Después de los hechos de violencia que sembraron el temor la noche del viernes y madrugada del sábado, Tabasco vivió una Navidad tranquila, con pocos reportes de accidentes o lesionados (en comparación con años anteriores), especialmente en Villahermosa, capital del estado.
Además, disminuyó la afluencia a centros comerciales y mercados. Solo en el Barrio Mágico Zona Luz, en el corazón de la ciudad, que alberga a más de 400 establecimientos, se estima que las ventas cayeron un 20 por ciento por debajo de las metas trazadas para estas fechas.
La Cruz Roja reportó 15 atenciones solamente durante el 24 de diciembre por accidentes, enfermedades y riñas, cifra similar al del promedio diario, mientras que el Ayuntamiento de Centro y el Sistema Estatal de Urgencias respondieron a 33 llamados desde el día 23.
El domingo, el gobernador Carlos Manuel Merino emitió un mensaje a los tabasqueños en el que aseguró que los integrantes de la Mesa de Seguridad y Protección Ciudadana del estado, continúan trabajando de manera coordinada para garantizar la seguridad y protección de los tabasqueños.
Fin de semana violento en Tabasco
El fin de semana la entidad sufrió la quema de casi 30 vehículos por hombres armados, que también atacaron una gasolinera, donde prendieron fuego, saquearon tiendas de conveniencia y realizaron disparos en por lo menos seis municipios.
Antes, hubo un enfrentamiento a balazos en el exclusivo residencial Campestre, frente al domicilio del secretario de Seguridad y Protección Ciudadana de Tabasco, Hernán Bermúdez Requena, aunque este rechazó que haya sido un ataque en su contra.
Además, tres reos murieron en los penales de Centro, Cárdenas y Huimanguillo tras motines e incendios provocados por los mismos internos.
“Hemos recuperado la normalidad y paz social, estamos haciendo uso de todos los medios para realizar las investigaciones y el procedimiento correspondiente para identificar a los probables responsables que han alterado el orden público”, expuso al respecto Merino Campos.
El sábado, una falsa alarma provocó pánico en el Centro Histórico de Villahermosa, interrumpiendo las compras navideñas de cientos de personas que, según las autoridades, confundieron el sonido de cohetes con el de disparos.
La psicosis que se generó repercutió en el transporte foráneo que redujo corridas y horarios “por seguridad”.
En Centro, Tabasco, una mujer aseguró que su camioneta fue atacada con una bomba molotov y el gobierno del estado desmintió este hecho, al asegurar que se trató de “pirotecnia de fabricación casera”.