El caso de Lefty SM no es el único en el que se relaciona a la delincuencia organizada con su muerte; en Jalisco, otros dos raperos han sido asesinados por tener relación directa con los criminales.
Otro rapero, QBA, trabajaba dentro del Cártel Jalisco Nueva Generación, (CJNG), y su labor era de “pozolero”, es decir, disolvía en ácido los cadáveres de sus enemigos, él destruyó los restos de jóvenes estudiantes de cine de la universidad de las artes visuales en el estado, quienes fueron previamente secuestrados.
En el país otros exponentes del rap mexicano también han sido blanco de la delincuencia organizada.
Lefty fue víctima de un ataque directo en su casa, ubicada en la colonia La Cima, en Zapopan, Jalisco. Los agresores irrumpieron en su domicilio y llegaron hasta su recámara, e intentaron secuestrarlo, como no lo lograron, los delincuentes, plenamente reconocidos por él, le dispararon y huyeron del fraccionamiento residencial,en un vehículo sin placas.
Al momento, se señala a un individuo como la persona que ordenó su ataque, y se acusa a un directivo de la Fiscalía de Jalisco como su protector.
Las letras de las canciones de los rap, en su mayoría abordan a personajes que forman parte de pandillas, y su muerte está asociada a actividades ilegales que realizaban.
Otro caso de un exponente de este género musical es Néstor Michel Zaragoza, conocido como Crash Lokote, quien contaba con 26 años de edad cuando, en noviembre del 2017, fue asesinado por los tripulantes de una camioneta quienes le dispararon mientras convivía con amigos en la colonia Infonavit Estadio de Guadalajara; el crimen sigue sin esclarecer, y solo se sabe que el rapero era miembro de una pandilla y que se burló en redes sociales de un grupo rival.
Otro rapero es Yosie Locote, asesinado en abril del 2018, su nombre real era Ramón Conchas, pertenecía al Cártel Nueva Plaza, una escisión del CJNG, se separaron tras traicionar al líder, Nemesio Oseguera Cervantes, y se originó una disputa por el control por la venta de drogas en el oriente de la Zona Metropolitana de Guadalajara.
El cantante fue secustrado en el barrio de Santa Cecilia de Guadalajara y, días después, el cuerpo fue localizado en las calles de Tetlán Río Verde, donde operaba su pandilla.
En esta misma colonia de partía QBA, quién era una joven promesa del género rap, y fue detenido tras el asesinato de tres estudiantes de cine de la Universidad de las artes visuales en Guadalajara, quienes rodaron un cortometraje de terror en una finca, propiedad de un líder de la nueva Plaza, grupo también conocido como el Cártel del 2, o de los cholos, y los muchachos fueron confundidos con miembros de este grupo delictivo.
Rielz Dos Achez, también fue asesinado el 4 de abril de 2023, mientras daba autógrafos en la Barbería & Arte Bonk, ubicada en la esquina de Zaragoza, Aztecas y Calzada de la Merced en el municipio de Valle de Santiago, Guanajuato.
Su nombre real era Mauricio Hernández Hernández, colaboró con Santa Fe Klan y Remik González. El crimen sigue impune.
Otro caso es el de Adán Zapata, quien tenía 21 años cuando fue asesinado, en junio de 2012, cuando circulaba en una camioneta amarilla sobre la calle Corregidora del municipio de San Nicolás de los Garza, donde un comando armado lo asesinó junto a sus acompañantes: Jesús Serna González, conocido como DJ Esus, Diego Salvatore y Héctor Daniel Almaraz Huerta, hijos del que fuera secretario de Seguridad Pública del municipio de Guadalupe, Santos Almaraz. El crimen se atribuye al Cártel del Golfo, presuntamente por su relación con un grupo delincuencial enemigo.