Un ambiente de miedo se respira en Coyuca de Benítez, Guerrero, un día después del homicidio del candidato de la coalición Fuerza y Corazón por México (PAN-PRI-PRD), José Alfredo Cabrera Barrientos.
El candidato opositor fue asesinado a disparos por la espalda en pleno cierre de campaña, el cual se llevó a cabo el miércoles 29 de mayo en el poblado Las Lomas, de donde era originario. Los hechos ocurrieron frente a cientos de simpatizantes y en presencia de la Guardia Nacional.
En un recorrido realizado este jueves, se observó que el lugar donde tuvo lugar el crimen permanece con cintas amarillas con la leyenda de Precaución, cuatro veladoras y un vaso con agua que colocaron familiares del candidato en el sitio donde fue asesinado.
También continúa el templete que se instaló para el cierre de campaña y quedó parte de la propaganda: globos de colores verde, blanco y rojo, banderas del PRI y del PRD, lonas, una cartulina con la imagen del candidato, playeras, una con restos de sangre, e incluso un ‘torito’ con el nombre de Alfredo Cabrera.
Vecinos que viven cerca de donde ocurrieron los hechos, prefirieron no hablar mucho sobre lo que pasó con el candidato, aunque reconocieron que desde la noche del miércoles viven con miedo y nerviosismo.
Mencionaron que Las Lomas siempre ha sido un poblado tranquilo, donde los ataques de esta naturaleza son raros, y donde no se habían visto los estragos de la inseguridad y la violencia que genera la delincuencia organizada.
Después del asesinato del candidato, contaron que dueños de casas cercanas abrieron sus puertas para permitir que mujeres y niños se refugiaran, ya que había muchas personas adultas mayores.
Ejército y Guardia Nacional resguardan las calles
La tarde del miércoles, el candidato comenzó su cierre de campaña con una caminata en la calle Elpidio Rosales, y llegó a la plaza de la comunidad acompañado de vecinos, sitio en el que también estuvo un día antes.
Tras el crimen que ha sacudido a Coyuca de Benítez, ahora se observa que en las principales calles de la ciudad hay presencia y recorridos del Ejército, Guardia Nacional y Marina, quienes también instalaron un retén en la entrada de la comunidad, donde revisan vehículos y motocicletas.
En la casa de la familia del candidato, ubicada a 300 metros de donde ocurrió el crimen, aún se espera la llegada del cuerpo de José Alfredo Cabrera, el cual ya fue entregado por el Servicio Médico Forense a una funeraria para que sea preparado y velado por familiares, amigos y vecinos.