La comandancia de la 11 Región Militar y los gobierno de los estados de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas acordaron este viernes blindar un punto de intersección geográfico, parte fundamental para el desarrollo del nearshoring en la región noreste del país, e instalar una base de seguridad que comandarán las fuerzas federales.
“Yo quisiera destacar como principal propuesta acordada, hacer una zona especial en Anáhuac, Nuevo León. Estamos replicando un modelo qué Coahuila replicó en la Laguna, con Gómez Palacio y Torreón, un grupo interinstitucional, esta zona con todo el crecimiento del nearshoring se ha vuelto muy importante, y por lo mismo los criminales pretenden afectarnos”, reveló el gobernador de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda.
El 69 Batallón de Infantería, destacamentado en la capital coahuilense, fue este viernes la sede de la reunión regional de Seguridad convocada por la 11a Región Militar, y a la que asistieron los gobernadores de Coahuila, Manolo Jiménez; Nuevo León, Samuel García, y Américo Villarreal, de Tamaulipas.
“Desde ahí se va a trabajar en conjunto Ejército, Guardia Nacional, Nuevo León, Coahuila y Tamaulipas, en Candela, en Anáhuac, en Laredo, y blindar toda esa zona, en esa tan importante aduana, la más importante del mundo que es la de Laredo, y ahora con Colombia”, detalló el mandatario neolonés.
Ejército reconoce presencia de cárteles en la región
Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, abarcan poco más de 3 mil 100 kilómetros de la frontera norte con Estados Unidos. El general comandante de la 11 Región Militar, Eufemio Alberto Ibarra Flores, reconoció la importancia de los tres estados en el desarrollo económico del país.
“El noreste del país, principalmente Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, son estados de gran valor estratégico, los cuales, deben mantener el alto valor de desarrollo que hasta hoy los ha caracterizado, ya que son de gran importancia para el desarrollo nacional, y por eso, es que la seguridad es de vital importancia para poder continuar en esa dirección”.
Ibarra Flores reconoció la presencia de carteles en el noreste del país, y dio a conocer que se han convertido en un reto que mantiene alertas a las fuerzas armadas.
“Los antagonismos que atentan contra la tranquilidad de los mexicanos, son cada vez más diversos y especializados. Nos comprometen a mantenernos cada vez más alertas y a la vanguardia, en los campos técnica, educacional y táctico”, dijo el mando militar. “Son las organizaciones delictivas que mantienen presencia en el norte del país, quienes se constituyen como un obstáculo de la merecida paz y tranquilidad que como mexicanos, responsables y trabajadores, merecemos”.
En la reunión también se acordó la coordinación para el control y regulación del flujo migratorio en la región noreste.