Estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, en Guerrero, irrumpieron en el Congreso del estado, donde quemaron autos y lanzaron explosivos al recinto legislativo.
En un evento fuera del Congreso, los activistas acusaron al presidente Andrés Manuel López Obrador de “engañar” a las familias de los 43 estudiantes, a quienes había prometido resolver el caso antes de terminar su mandato, el próximo 30 de septiembre.
La protesta, a 13 días de que se cumplan 10 años de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, dejó un saldo de 15 vehículos afectados, tres de ellos fueron quemados.
Como parte de esa agresión al edificio legislativo, no se reportaron personas lesionadas.
Constantino González Vargas, director de Seguridad del Congreso Local, explicó que desde que les informaron que los estudiantes normalistas se dirigían al Congreso local desalojaron a por lo menos 300 de los 400 trabajadores que laboran en el recinto legislativo.
“Se aplicó el plan de emergencia, afortunadamente no tenemos daños al personal, pero sí daños materiales, hay 15 vehículos afectados y nueve explosivos que detonaron”, dijo el responsable de la seguridad del Congreso de Guerrero.
Señaló que los manifestantes utilizaron una camioneta con la leyenda de Ayotzinapa, que impactaron contra la reja principal del estacionamiento, hasta que la derrumbaron e ingresaron para lanzar petardos contra los vehículos.
Constantino González recordó que recientemente se aprobó una ley que prohíbe la utilización de explosivos y que castiga hasta con 40 años de cárcel a quienes los utilicen.
Después de que se retiraron los normalistas, arribaron al Congreso local dos unidades de bomberos y personal de esa corporación municipal y estatal para sofocar el fuego de los vehículos que fueron incendiados.
¿Por qué protestaron los normalistas de Ayotzinapa este viernes?
Los manifestantes acusan al presidente, Andrés Manuel López Obrador, de no resolver el caso y de encubrir al Ejército, a pesar de que la Comisión de la Verdad creada por su Gobierno concluyó en 2022 que (la desaparición de los 43) fue un “crimen de Estado” con la participación de autoridades de todos los niveles, incluyendo Fuerzas Armadas.
Los manifestantes han anunciado protestas a partir de esta semana, que se extenderían hasta las vísperas del 1 de octubre, cuando asume la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, del mismo partido de López Obrador, y con quien ya han hablado los familiares de los 43 respecto a lo qué vendría para la investigación del caso bajo su Administración.
Con información de EFE