Estilo

¿Shein busca redención? Viaje de influencers a fábrica en China causa indignación en redes sociales

Usuarios de redes sociales han acusado a un grupo de influencers de ayudar a limpiar la imagen de Shein ante las acusaciones de explotación laboral.

Shein invitó a un grupo de influencers a sus instalaciones en China tras las acusaciones por explotación laboral. (Bloomberg)

La visita de seis influencers a las instalaciones de producción del gigante de moda ultrarápida, Shein, causó indignación en redes sociales y provocó duras críticas contra el contenido patrocinado.

En un video publicado por la empresa en TikTok hace un par de semanas, se puede observar a un grupo de mujeres tomando un avión a Guangzhou, China, donde se encuentra su sede. Desde ahí grabaron videos donde aparecen los empleados de fondo, en instalaciones relucientes y ordenadas.

Los contenidos fueron ampliamente criticados por seguidores quienes aseguraron que se mostraba una versión “blanqueada” de la empresa, una fachada de las verdaderas condiciones laborales que enfrentan sus trabajadores. Algunos videos fueron eliminados tras las reacciones negativas aunque otros, como los de Shein, permanecen en la plataforma.

Destene Sudduth, influencer con 4.1 millones de seguidores en TikTok y 385 mil en Instagram, fue una de las invitadas que acudió a la fábrica de innovación de Shein, en donde producen las muestras de ropa para enviarlas al resto de almacenes. Ahí entrevistó a trabajadores, quienes, según cuenta, se mostraron confundidos ante los señalamientos de explotación laboral y aseguraron trabajar de 8:00 a 18:00 horas, es decir 10 horas al día.


@itsdestene_ Replying to @Melanin 👸🏿 Codi👑 im thoroughly enjoying this experience and seeing things with my own eyes 🫶🏾 @SHEINUS #SHEIN101 #SHEINOnTheRoad #desteneandbrandon ♬ original sound - Destene and Brandon

Las demás influencers, entre las que se encuentran Dani Carbonari, Aujené, Fernanda Stephany Campuzano, Kenya Freeman y Marina Saavedra, hicieron publicaciones similares en sus respectivas cuentas sin embargo, algunas fueron eliminadas.

A finales del año pasado, Shein anunció que destinaría 15 millones de dólares en modernizar sus instalaciones después de haber sido acusada en un documental de la televisión británica de abuso laboral en dos de sus fábricas, en donde los empleados trabajaban jornadas de hasta 18 horas y eran multados por cometer errores.

Tras una revisión independiente, la empresa admitió que los trabajadores de una de sus fábricas trabajaban hasta 13.5 horas diarias pero descartó retener los salarios de los trabajadores o deducirlos ilegalmente si no se cumplían los objetivos.

Shein también ha enfrentado críticas por sus prácticas medioambientales, sociales y de gobernanza, y el robo de derechos de autor. El gigante en línea ha trastornado la industria de la moda rápida con sus ventas de camisetas en 6.16 dólares y vestidos de 11 dólares.

También lee: