En Latinoamérica existen más de 1,500 empresas fintech, terminando 2021 con 7 unicornios en total. Esto puede atribuirse a que el sector continúa atrayendo interesantes rondas de inversión, tomando entre 35 y 40% del dinero de Venture Capital.
Se prevé que el sector siga en auge. Algunas áreas que podrían crecer son banca abierta, habilitadores KYC (conozca a su cliente), infraestructura de pagos digitales, aumento de nuevos mercados B2B, impulso del comercio electrónico, explosión de criptoproyectos, NFTs, DeFi, métodos de pago digitales para industria del juego, tecnología de la riqueza (productos de inversión), adquisiciones intercompañías y SPACs.
Algunos proyectos fintech latinoamericanos que serán tendencia este año son: 1. Avista (Colombia), una de las 50 fintech más inclusivas del mundo, otorga créditos a grupos de bajos recursos; 2. Nu (Brasil), ofrece tarjetas de crédito y cuentas de ahorro, alianza con Mastercard; 3. Vexi (México), créditos a personas que necesitan reconstruir su historial crediticio, asociación con American Express; 4. Konfió (México), otorga créditos a pymes y emprendedores; 5. Finaktivá (Colombia), su plan es convertirse en un neobanco enfocado a emprendedores; 6. Kueski (México), préstamos en diferentes modalidades, ya sea inmediatos o para compras online para usuarios sin necesidad de tener una cuenta bancaria; 7. Máximo (Perú), en asociación con Mastercard, tarjeta enfocada al mercado gamer ofreciendo descuentos y cashback canjeables por dinero digital; 8. Xepelin (Chile), ofrece préstamos para pymes, respaldada a través de factoring (tipo de crédito empresarial respaldado por las cuentas por cobrar de las empresas que solicitan el préstamo).
Cada vez se verán más empresas inmobiliarias realizando transacciones con criptomonedas, tal es el caso de LaHous, la cual acaba de realizar su primera venta en Bitcoin, un departamento en Riviera Maya con valor de 5,78 ₿.
La adopción de criptomonedas en América Latina avanza a pasos agigantados, ya que las personas recurren más a los activos digitales como un medio para protegerse contra la depreciación de la moneda local y/o el aumento de inflación.
Para 2022 los inversionistas seguirán apostándole en primer lugar a las fintech, seguido de proptech, edtech y healthtech. Existe mucho capital disponible, por lo que este año se verá una expansión de este recurso en espacios que requieren un solo ganador.
La persona que desee invertir en fintech debe entender que esta industria es para un perfil con tolerancia a la volatilidad y riesgo. Como cualquier industria nueva, es probable que sea una especie de montaña rusa a medida que la industria madure. Algunas ramas son negocios cíclicos, tal es el caso de aquellas empresas que se desarrollan en torno a las tecnologías de pago. Sin embargo, hay otro rubro que no es cíclico, por ejemplo, las empresas que desarrollan tecnología para compañías de seguros.