Comer tacos al carbón es un placer difícil de encontrar en la Ciudad de México, donde proliferan más bien las hamburguesas de este tipo, en los carritos llenos de humo que se instalan en las calles con sus parrillas.
Este combustible es popular en las gastronomías del norte del país, en especial en las carnes asadas, aunque se ha utilizado desde el momento en que el ser humano comenzó a usar en fuego.
En la investigación Al carbón: la cultura de la carne asada en Nuevo León, del Museo Estatal de Culturas Populares, se explica que la cocción de la carne al carbón es un procedimiento de transformación química: “más allá de la mano que voltea la carne es el promotor de las interesantes transformaciones que experimenta la carne por la cocción y el asado”.
Además se detalla que este proceso hay una pérdida de peso en la carne y se forma una costra de proteínas, así como sustancias aromáticas provenientes de grasas y proteínas del jugo.
Los sabores ahumados que comienzan con el carbón dan un resultado dorado y jugoso, combinación deliciosa que se lleva al taco.
Las dos taquerías de ley
Dos de los lugares imprescindibles para comer tacos al carbón son Los Provolones y Tacos norteños Blanquita.
El primero es un puesto de la calle Rosales, en el centro de la Ciudad de México, donde encuentras opciones como arrachera, salchicha italiana, panceta, chorizo argentino y una variedad de embutidos, todo con queso provolone; el segundo sitio es una taquería de Iztapalapa en la calle Atanasio G. Sarabia que desde hace varias décadas trae del norte los sabores de la carnita asada, con sus tuétanos al carbón.
Si ya conoces estos dos lugares puedes continuar tu recorrido ahumado por las siguientes opciones.
Los Picudos
El 1981 este local llenó el barrio con sus sabores de humo. Son tacos sin tanto rodeo, para quienes aman los sabores tatemados y el sabor jugoso de la carne impregnado del humo de carbón con unas cebollitas un poco quemadas por fuera.
Hay de bistec, costilla, chuleta, arrachera, pechuga o un buen alambre con queso para ir echando taco con su salsa brava.
También ofrecen quesadillas flameadas con carne y sus “volcanes” realmente saben como si vinieran de las profundidades de un cráter.
Para acompañar es clásica una chelita y al final un café de olla.
Miguel Laurent 101, Tlacoquemecatl del Valle, Benito Juárez, 03200 Ciudad de México, CDMX
Tacos Guacamole
Estos tacos norteños (del norte de la Ciudad de México) los preparan al carbón de chistorra, longaniza, chorizo argentino, aguja norteña, costilla de Roast Beef, picaña, arrachera, T-Bone y Ribeye.
Para hacer honor a su nombre, tienen un guacamole de molcajete bien picoso, también hay salsa con piña asada, chimichurri y sus tacos vienen con nopales y papas, salsas.
Son bastante populares sus papas asadas.
Av. Victoria Ote. 3320, Aragón Inguarán, Gustavo A. Madero, 07820 Ciudad de México, CDMX
Los de asada
Un lugar para los amantes de la parrilla donde hay muchas posibilidades asadas.
Hay cortes de carne, costillitas BBQ y tacos de tuétano, bistec, cecina, chuleta, Sirloin, Picaña, molleja, lengua y un largo y carnívoro etcétera.
También hay una selección de tacos de autor donde encuentras opciones como Asada (Picaña, Pork Belly, longaniza y guacamole), Regio (pastor, bistec, queso y guacamole en tortilla de harina), o Topo Chico (arrachera, Pork Belly, queso y guacamole en “volcán”).
Incluso tienen hamburguesa asada y para compartir un Molcahulk: 3 kilos de diferentes carnes con dos kilos de tortillas.
C. Kansas 93, Nápoles, Benito Juárez, 03810 Ciudad de México, CDMX