Food and Drink

¿Cómo saber si eres ‘adicto’ al café?

¿Dejarías el café? Esta bebida es una de las más consumidas en el mundo, para quienes lo dejan pueden experimentar abstinencia.

Al dejar el café puedes experimentar síndrome de abstinencia. (Foto: Shutterstock).

¿Seguro que podrías dejar el café? Esta bebida es una de las más populares en el mundo, para algunas personas parece impensable iniciar el día sin esa tacita humeante de cafeína que es considerada la única droga aceptada en todo el planeta.

Debido a la cafeína, su sustancia activa, el café ha sido estudiado para conocer si se puede generar una adicción, las conclusiones indican que no es posible, ya que su consumo no representa una amenaza y en cantidades moderadas incluso representa varios beneficios para la salud.

En el artículo Is caffeine addictive?, publicado en 1998, se describe a la cafeína como “la sustancia psicoactiva más utilizada en el mundo”, consumida en cantidades lo suficientemente grandes como para tener un efecto en el cerebro, afecta las mismas partes del cerebro que la cocaína, pero de formas diferentes.

¿Qué es la dependencia a la cafeína?

El Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas detalla que la cafeína no genera una adicción, pero sí es posible desarrollar una dependencia porque esta sustancia produce un pequeño aumento de dopamina, pero “no provoca el gran aumento que desequilibra los circuitos de recompensa en el cerebro y es necesario para una adicción”.

American Psychiatric Association (APA) describe que en bebedores habituales “la dependencia de la cafeína puede convertirse en un hábito difícil de eliminar, lo que lleva a un trastorno por uso de sustancias en toda regla, según ha demostrado la investigación”. Esto sucede porque es un poderoso compuesto psicoactivo que tiene efectos como:

  • Aumentar el estado de alerta
  • Sensación de energía
  • Sensación de bienestar
  • Es químicamente similar al neuromodulador adenosina, que induce somnolencia, por lo que bloquea sus efectos y ‘quita’ el sueño.
  • Aumenta de forma mensurable el rendimiento cognitivo.
  • Beneficios para la salud mental: menor riesgo de depresión.
  • Reducción del riesgo de deterioro cognitivo.

Alan Budney, profesor de psiquiatría en la Escuela de Medicina de Dartmouth, dice en un artículo que la cafeína puede actuar de forma similar a otras drogas: “Las personas desean el efecto y repiten el comportamiento una y otra vez. Cuando los reforzadores como ese son fácilmente accesibles y económicos, su uso puede salirse de control”.

“Si crees que no puedes dejar de tomar café, puede que tengas razón”, agrega la APA, ya que algunos consumidores no pueden mantenerse alejados de esta bebida y presentan:

  • ‘Trastorno por consumo de cafeína’.
  • Síndrome de abstinencia después de dejarlo.
  • Consumir más de lo previsto y pasar mucho tiempo con la droga.

Budney describe al síndrome de abstinencia de la cafeína como aquel que se produce cuando las personas se saltan una dosis de cafeína y experimentan:

  • Dolores de cabeza
  • Fatiga
  • Depresión
  • Problemas de concentración

“Las investigaciones sugieren que muchas personas consumen cafeína sólo para evitar estos síntomas, aunque otras, sobre todo niños y adolescentes, pueden no entender por qué se sienten cansados y tienen un fuerte dolor de cabeza”, describe la APA.

¿Cómo saber si dependes de la cafeína?

Si dejas de tomar café durante un día y experimentas los síntomas de abstinencia, es posible que dependas de la cafeína.

Según Cleveland Clinic, muchas personas desarrollan una tolerancia a la cafeína: aumentan su consumo para conseguir los efectos en el sistema nervioso, ya que la cantidad habitual ya no los genera.

Sin embargo, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA por sus siglas en inglés), dicta que la dosis adecuada para las personas adultas sanas es de 400 miligramos de cafeína al día, equivalente a cuatro o cinco tazas de café.

¿Cómo dejar la dependencia al café?

Si se quiere limitar el consumo de cafeína, se pueden tomar algunas de estas recomendaciones:

  • Retrasa el consumo de café una hora después de despertarte por la mañana: el cuerpo no necesita un estimulante al despertar porque produce cortisol de forma natural, lo cual da energía sin necesidad de la bebida.
  • Disminuye gradualmente la cantidad.
  • Aumenta el consumo de agua.
  • Reemplaza una bebida con cafeína con una que no contiene.
  • Incorporar ejercicio en la rutina diaria.

También lee: