¿Te lanzas por los ‘chescos’ o destapas unas ‘frías’? Los refrescos y las cervezas son de las bebidas más populares en todo el mundo, en especial en tiempos de calor o para acompañar los taquitos, aguachiles, birria y casi cualquier plato fuerte y botana.
Hay personas disfrutan la sensación refrescante de estas bebidas que comparten la característica de ser carbonatadas, es decir, tienen gas, aunque sus ingredientes y valores nutricionales las vuelven muy distintas.
¿Cerveza o refresco: cuál tiene más calorías?
El sitio de Web MD, especializado en temas de salud, explica que una lata de 354 ml de refresco contiene alrededor de 125 a 180 calorías.
En el caso de la cerveza, Medline Plus explica que una lata de 354 ml contiene alrededor de 153 calorías.
Según My fitness pal, este es un promedio de lo que se necesita para quemar las calorías de cada una de las bebidas:
- Cerveza: 23 minutos de ciclismo y 15 de correr para quemar 150 calorías.
- Refresco: 24 minutos de ciclismo y 16 de correr para quemar 160 calorías.
¿Cerveza o refresco: cuál hace más daño?
La mejor opción para la salud siempre será el agua simple, la única indispensable para el cuerpo. Aunque un vaso de refresco o una cerveza de vez en cuando podría no causar mayores daños, su consumo cotidiano y excesivo se ha asociado con varias enfermedades y padecimientos.
Cerveza
La cerveza es una bebida alcohólica que se obtiene de la fermentación de cereales germinados, principalmente cebada, a la que se le añada lúpulos (un tipo de planta).
Harvard T.H. Chan School of Public Health afirma que tomar alcohol de forma moderada puede ser saludable para la mayoría de la persona, excepto para algunos grupos que no deben tomar cerveza y demás bebidas: “Es seguro decir que el alcohol es tanto un tónico como un veneno. La diferencia radica principalmente en la dosis”.
Así, un consumo con moderación podría beneficiar al corazón y sistema circulatorio, además de proteger contra la diabetes tipo 2, según algunos estudios, pero el exceso es una de las principales causas de muerte en diversos países y puede causar daños a la salud.
El consumo excesivo de cerveza (más de dos latas diarias en hombres y más de una en mujeres) puede traer consigo efectos secundarios, que incluyen:
- Aumento de peso: Eat this, not that explica que la cerveza puede acumular demasiadas calorías vacías para el cuerpo humano.
- Problemas cardiovasculares
- Debilitamiento del sistema inmune
- Problemas de memoria
- Aumento en presión arterial
- Hinchazón
- Riesgo de desarrollar diabetes
- Puede dañar el hígado y el corazón
- Aumentar las posibilidades de desarrollar cáncer
- Contribuir a la depresión y la violencia
Refrescos
Los refrescos son bebidas azucaradas con azúcar o edulcorantes como el jarabe de maíz.
Según Eat this, not that, no hay debate sobre si el refresco puede ser sano o no: los especialistas coinciden en que no lo es, incluso hay algunos que hacen más daño como el de cola o el de naranja, ya que pueden tener sustancias como ácido fosfórico (que daña los huesos), saborizantes, colorantes, azúcares y cafeína.
A diferencia del alcohol, cuyo consumo se recomienda ser moderado, Harvard T.H. Chan School of Public Health sugiere mejor evitar todo tipo de bebidas azucaradas.
Algunos efectos secundarios de consumir refresco diario pueden ser:
- Aumento de peso
- Riesgo de padecer obesidad
- Riesgo de enfermedades cardiovasculares
- Puede aumentar el riesgo de padecer gota
- Es de las bebidas que afectan más a los riñones
Entonces, ¿es mejor la cerveza o el refresco?
“No existen alimentos ‘buenos’ o ‘malos’, únicamente hábitos alimenticios que nos benefician o perjudican”, explica la Revista del Consumidor de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
Tanto la cerveza como el refresco son bebidas perjudiciales para la salud si se toman en exceso, ya que ambas contienen altos niveles de calorías y componentes que causan afectaciones importantes.
Sin embargo, el sitio de Harvard T.H. Chan School of Public Health señala que las bebidas azucaradas deben evitarse, mientras que el alcohol puede tener un consumo moderado, es decir, que la cerveza es una bebida más saludable si se compara con cualquier tipo de refresco aunque también conlleva su carga de efectos secundarios si no se bebe de manera moderada.