Taste Atlas lo hizo de nuevo, el sitio especializado en gastronomía publicó los 150 restaurantes legendarios en el mundo con los platillos que los distinguen, y tres lugares mexicanos están incluidos.
No obstante, solo uno colocó en el codiciado top 5: La Polar, famoso restaurante en la Ciudad de México que fue clausurado en enero pasado por el homicidio de un cliente.
De acuerdo con el sitio, cuyos rankings de comida van desde platillos, lugares hasta ingredientes de todas partes del mundo, La Polar -establecimiento fundado en 1934- ocupa el lugar número 4 del listado, y el platillo destacado por excelencia es la birria de chivo.
El segundo sitio citado en la lista de 150 restaurantes legendarios, y que se coloca en el lugar 13, es el Café de Tacuba (1912), ubicado en el centro histórico de la CDMX, y cuyo platillo destacado por el atlas fueron las enchiladas.
Karne Garibaldi es el tercer establecimiento mexicano en el top de Taste Atlas. El restaurante tapatío se posiciona en el sitio 19 con una imperdible carne en su jugo. De acuerdo con la página web de este rincón jaliciense, los abuelos Doña Jita y Don Néstor abrieron el local en la esquina de las calles Garibaldi y José Clemente Orozco en 1970.
La Polar en el top 5 de Taste Atlas
De acuerdo con la descripción del sitio, la legendaria birria de chivo de La Polar, cuya receta secreta ha intrigado a miles de comensales y chefs que han pasado por sus mesas, así como “el ambiente vibrante y bullicioso” lo convierten en un espacio que “ha dejado huella” en la capital mexicana.
Si bien la birria es un platillo originario de Jalisco, en el centro del país ya se ha convertido en uno de los imprescindibles para el desayuno en fines de semana o comidas especiales.
Su método de preparación, que se caracteriza por una cocción ‘a fuego lento’, asegura que la carne se mantenga tiernita hasta que se sirve a los comensales.
Algunos de los ingredientes que se utilizan para el guiso incluyen chiles asados, ajo, comino, hojas de laurel y tomillo, pero cada familia y establecimiento agrega otros elementos según sus recetas.
Taste Atlas recoge algunos datos acerca de la cultura gastronómica callejera en México, por ejemplo, la fama de este fama de este platillo que presume curar la ‘cruda’ tras una noche intensa de fiesta o borrachera.
La historia de La Polar
En 1934 se instaló en la calle Guillermo Prieto 129 de la colonia San Rafael una cervecería, cuyos propietarios eran originarios de Ocotlán Jalisco.
A los fundadores se les ocurrió comenzar con la venta de la birria de chivo, platillo tapatío pero con el sello de su receta familiar.
Apenas unas mesas se veían en los comienzos de este lugar, sin embargo, la popularidad pronto hizo prosperar el giro de comida y para la década de los 80, la cervecería y la birriería se fusionaron un solo negocio.
El resultado: un restaurante-bar que se extendió y que ‘absorbió' a varios locales aledaños hasta conformar seis salones en total.
Una de las secciones fue nombrada Lupillo Rivera, como el cantante de regional mexicano, quien ha tenido una relación cercana con los propietarios.
La amistad del intérprete con la propietaria del lugar, mejor conocida como ‘Mari Trini’ o ‘doña Trini’, es tan cercana que en julio del año pasado Lupillo le dedicó algunas palabras:
“A doña Trini le mando mucho cariño, muchas gracias por ese cariño que nos tiene, esa admiración, yo la admiro mucho a ella, a su familia, llevan tanto año aquí, representando a México entero”, dice Rivera en un video en las redes de La Polar.
¿Qué pasó en La Polar?
El restaurante de birria permanece cerrado desde enero pasado tras el asesinato de Antonio Monroy, cliente del establecimiento.
De acuerdo con las investigaciones de la Fiscalía de la CDMX, trabajadores de La Polar mataron a golpes al hombre de 59 años quien había reclamado un cobro excesivo en su cuenta.
Los dictámenes de necropsia al cuerpo de Antonio Monroy Jiménez revelaron que la causa del deceso fue asfixia por estrangulamiento.
Con base en el dictamen se concluyó que no fueron los golpes los que mataron a Antonio, sino que le aplicaron un mecanismo de opresión sobre el cuello, muy probablemente la llamada “llave china”.
Adriana Amaranto, identificada como la pareja de la víctima, declaró que habían ingirido bebidas alcohólicas en el restaurante-bar, pero al momento de que revisaran la cuenta fueron agredidos por física y verbalmente por trabajadores del lugar, quienes los sacaron del inmueble a golpes.
En abril un juez de control de Ciudad de México, vinculó a proceso a Gustavo ‘N’, elemento de seguridad de La Polar quien estuvo involucrado directamente con el homicidio de Antonio.