En la colorida variedad de flores comestibles, la manzanilla no solo forma parte de recetas de cocina, sino que destaca como uno de los ingredientes más populares en remedios caseros de México, en especial se recomienda consumir su té en las noches.
Esta hierba medicinal aromática es de la misma familia que las margaritas, los girasoles y los crisantemos, se usaba con fines curativos en el antiguo Egipto, Grecia y Roma.
El sabor reconfortante de su infusión ha sido recomendada por las abuelas desde hace décadas, en especial para beneficiar al estómago; esas tazas también acompañan a personas en pijama de todo el planeta justo antes de ir a la cama, ¿pero qué hace exactamente y qué tanto se ha probado?
¿Qué beneficios tiene tomar manzanilla en las noches?
Si bien es una infusión que se puede consumir a cualquier hora, la manzanilla es una bebida libre de cafeína, por lo que es una de las alternativas preferidas al té negro o verde, los cuales tienen este compuesto activo del café.
Hay muchos mitos sobre consumirla en ese momento del día, por ejemplo, se ha dicho que ayuda a adelgazar, lo cual no está comprobado, pero sí tiene otros efectos positivos en el cuerpo.
Induce el sueño
En el artículo ‘Los mejores tés para la salud’ de Cleveland Clinic, la dietista Beth Czerwony describe a esta floreada opción como la mejor opción para tomar antes de dormir debido a que contiene apigenina, un antioxidante que induce el sueño.
Este compuesto se adhiere a los receptores del cerebro y ayuda a reducir la ansiedad, con lo que se produce somnolencia.
Czerwony detalla: “La manzanilla actúa básicamente como un tranquilizante suave. Esos sorbos realmente te ayudarán a dormir”.
Podría reducir el insomnio
El insomnio es un trastorno frecuente del sueño que evita conciliarlo o mantenerlo, incluso en las mejores condiciones para dormir bien, puede durar poco tiempo por factores como el estrés, pero hay uno de largo plazo, llamado crónico.
De acuerdo con National Institutes of Health (NIH), no se sabe mucho sobre los efectos de la manzanilla en el insomnio, aunque un estudio pequeño de 2019 encontró que podría ayudar a mejorar la calidad del sueño en algunas personas.
Healthline agrega que la apigenina podría reducir el insomnio y hay estudios donde se ha probado que los extractos de esta planta ayudan a despertar menos en la noche y dormir hasta 15 minutos más rápido:
“Estos resultados son prometedores, pero se necesitan más estudios para determinar el alcance de los efectos del té de manzanilla sobre el sueño. No obstante, si tiene problemas para conciliar el sueño o permanecer dormido, pruebe a tomar té de manzanilla antes de acostarse”.
Beneficios: ¿Para qué sirve el té de manzanilla?
La manzanilla es rica en antioxidantes que ayudan a combatir el estrés oxidativo en las células que causan enfermedades. Según Healthline, sus principales efectos son ayudar a mejorar el sueño y la digestión.
Según el NIH y Healthline, en la actualidad la manzanilla se estudia por sus potenciales beneficios para:
- Combatir el insomnio.
- Contra la ansiedad.
- Aliviar afecciones gastrointestinales: malestar estomacal, gases y diarrea.
- Afecciones cutáneas y llagas bucales (vía tópica).
- Efectos antiinflamatorios.
- Podría favorecer el control del azúcar en sangre si se consume con las comidas.
Sin embargo, el NIH dice que en realidad poco se ha comprobado sobre los beneficios de esta planta para la salud, ya que no hay muchos estudios al respecto, además, muchos refieren a productos que la incluyen como ingrediente, no al té.
Hasta ahora se ha encontrado que algunos suplementos de manzanilla y productos que la contienen podrían ser útiles para el trastorno de ansiedad y para aliviar malestar estomacal, diarrea infantil y los cólicos.
¿Cuándo no se debe tomar té de manzanilla?
Un uso cotidiano de la manzanilla en la cocina, en cantidades moderadas, se considera seguro. En general, sus efectos secundarios no son comunes, pero puede presentarse en ocasiones:
- Náuseas.
- Mareos
- Reacciones alérgicas, en especial si ya se tiene una alergia a plantas parecidas, como la ambrosía, los crisantemos, las caléndulas o las margaritas.
- No se sabe qué tan seguro es su consumo para personas embarazadas, durante la infancia, lactancia y en personas con enfermedades hepáticas o renales.