La variedad de bebidas para tomar en las mañanas abarca desde el clásico jugo de betabel con zanahoria al licuado de manzana con avena, pero entre las opciones más nutritivas encontramos al jengibre.
El jengibre es un tubérculo aromático pariente de la cúrcuma, su sabor es picante y aparece fresco o en polvo en todo tipo de bebidas, guisados, pasteles y confituras; además, destaca por sus propiedades medicinales.
Debido a su sabor intenso, es un poco más común encontrar el jengibre combinado; su jugo destaca por su potencial, algunas personas lo toman en ‘shot’, es decir, una pequeña cantidad concentrada elaborada con la raíz fresca, o bien, lo agregan a otros jugos o lo diluyen en agua.
¿Qué pasa si tomo jugo de jengibre en ayunas?
Las personas esperan que el hábito de consumir algo con el estómago vacío traiga superbeneficios, pero la realidad es que eso no hace más potentes las propiedades de un ingrediente.
El dietista Daniel Ursúa (citado por El Español) dice: “El hecho de comer algo en ayunas le aporta un cierto misticismo y la idea preconcebida de que, al ser lo primero que comamos, lo vamos a aprovechar al máximo y va a suponer una gran diferencia en el resto del día... Creo que psicológicamente supone una pequeña excusa para el resto del día: ‘Como ya me he tomado el aceite en ayunas, da igual que desayune un croissant con jamón y queso’”.
Aunque tomar jugo de jengibre en ayunas no hace la diferencia respecto a otra hora del día, puede ser una excelente manera de iniciar el día y convertirse en un hábito saludable por sus propiedades antiinflamatorias, antioxidantes, beneficiosas para la digestión y el sistema inmune.
Potentes efectos antioxidantes y antiinflamatorios
De acuerdo con Healthline, el gingerol es el principal compuesto activo del jengibre y es el responsable de muchos de sus beneficios, le da a la planta su sabor y olor y tiene potentes efectos antiinflamatorios y antioxidantes. También tiene otras sustancias llamadas paradoles, sesquiterpenos, shogaoles y zingerona.
Los antioxidantes presentes en alimentos como este ayudan al cuerpo a luchar contra el estrés oxidativo que causa enfermedades crónicas como diabetes, cáncer y cardiopatías.
Beneficia a la digestión y ayuda contra las náuseas
El jengibre beneficia a la digestión no solo por sus efectos contra la inflamación, la dietista Candace O’Neill explica a Cleveland Clinic que puede ayudar contra la indigestión, la hinchazón, el estreñimiento y las náuseas.
“Los beneficios del jengibre para la salud digestiva se atribuyen en gran medida a la presencia de gingerol, un compuesto bioactivo que aumenta la velocidad a la que los alimentos salen del estómago y avanzan a través del proceso digestivo”, detalla Harvard T.H. Chan School of Public Health.
Beneficia al sistema inmune
La nutrióloga Majo Gallardo, nutrióloga clínica y deportiva, recomendó en TV UNAM tomar un shot de jengibre en las mañanas para fortalecer el sistema inmune.
O’Neill sugiere mezclar el jengibre con alimentos ricos en vitamina C: “Consumir estos nutrientes juntos puede ayudar a aumentar la ingesta de alimentos que combaten el sistema inmunológico”, afirma O’Neill.
Healthline coincide: “Aumentar la ingesta de alimentos y bebidas ricos en antioxidantes, como los shots de jengibre, puede combatir la inflamación y mantener sano el sistema inmunitario”. Para ello, se aconseja también agregar miel y el jugo de limón, ya que ambos ingredientes “tienen efectos antibacterianos y antivirales”.
Podría ayudar a bajar de peso
Estudios preliminares citados por Healthline han visto que el jengibre podría tener influir en la pérdida de peso, en especial porque ayuda a bajar la inflamación.
Falta más investigación al respecto, recuerda que ningún alimento te hace perder peso mágicamente, la forma más segura es una alimentación equilibrada, hacer ejercicio y si tienes una condición específica es necesario consultar a un médico.
Podría controlar el azúcar y el colesterol
Investigaciones previas han visto que el jengibre podría tener propiedades antidiabéticas, dice Healthline, por ejemplo, por la posible reducción del azúcar en la sangre en ayunas, aunque se ha analizado suplementos, no jugos.
“Hay cierta evidencia de que puede mejorar la sensibilidad a la insulina y puede reducir algunas enzimas del cuerpo que descomponen los carbohidratos y aumentan el metabolismo de la glucosa”, apunta O’Neill.
Lo mismo sucede con el colesterol: el consumo de jengibre se ha relacionado con una baja en triglicéridos y colesterol ‘malo’.
¿Cómo preparar jugo de jengibre?
La dietista Candace O’Neill añade: “El jengibre fresco puede ser picante al consumirlo. Por eso, normalmente se le añaden otras bebidas para hacerlo más agradable al paladar y prevenir el reflujo gástrico... Si tienes un sistema digestivo sensible, empieza con una porción pequeña, de 14 a 28 gramos, antes de aumentar la ingesta”.
Puedes tomar el jugo de jengibre en un shot (mezclado con jugo de limón, cúrcuma, pimienta o miel), o bien, diluido en agua o en otros jugos como naranja.
Pero evita el azúcar añadido y, si lo mezclas, no te excedas con jugos de otras frutas como la naranja, ya que ello representa demasiadas calorías y puede afectar el azúcar en la sangre.
Ingredientes
- 1 trozo de jengibre fresco (5-7 cm)
- ¼ taza de agua
- Opcional: Jugo de ½ limón o 1 cucharadita de miel
Método 1: Exprimido manual
- Pela el jengibre y rállalo finamente.
- Exprime la pulpa con las manos o usa un colador de malla fina para extraer el jugo.
- Mezcla el jugo concentrado con el agua.
- Opcionalmente, agrega limón o miel para equilibrar el sabor.
- Bebe en un solo trago o dos.
Método 2: Licuadora o procesadora
- Pela y corta el jengibre en trozos pequeños.
- Licúa con el agua hasta obtener un líquido homogéneo.
- Cuela.
- Agrega limón o miel si lo deseas.
- Sirve en un vasito pequeño y consúmelo de un solo trago.
Efectos secundarios del jugo de jengibre
Aunque se considera seguro para la mayoría de las personas, es necesario moderar las cantidades, ya que algunas personas podrían presentar ante grandes dosis:
- Malestar estomacal (acidez, diarrea, molestias).
- Irritación de boca y garganta.
- Interacciones con medicamentos como los anticoagulantes y para bajar el azúcar.
- Personas durante el embarazo y lactancia deben consultar a un médico.
