Fenómenos Digitales

Realidad virtual vs. realidad aumentada y el metaverso

Estamos por experimentar una revolución tecnológica de proporciones inimaginables, y las empresas deben tenerlo en cuenta para aprovechar las oportunidades que esto traerá.

Esta es la segunda entrega de una serie de textos sobre el metaverso y sus implicaciones. Puedes revisar la primera : ¿Qué es realmente el metaverso?

Como lo mencioné en el artículo anterior, la idea de un metaverso único como un mundo virtual alternativo donde todos estaremos la mayor parte del tiempo, donde una casa virtual costará más que una física y en el que sustituiremos la realidad con una versión virtual, es casi imposible.

La razón es que existen varios jugadores que desarrollaran software y ecosistemas a los cuales podríamos llamar metaversos, incluyendo compañías como Meta (antes Facebook), Fortnite, Snapchat, Microsoft, Apple, entre otros.

En el ejemplo anterior estamos hablando de realidad virtual (VR) y su diferencia con realidad aumentada (AR) nos muestra un futuro más prometedor.

La realidad virtual es la percepción que todos tienen del metaverso, un mundo digital alternativo donde estaremos la mayor parte del tiempo desconectados de nuestra realidad. Imagina las peliculas de The Matrix o Ready Player One.

La realida aumentada, por otra parte, una vez que la tecnología alcance las expectativas, ‘agregará' a nuestra realidad sin desconectarnos de la misma.

Tecnológicamente hablando, la realidad virtual es más factible que una realidad aumentada.

La realidad virtual genera una nueva realidad para tus sentidos, audio, video, sensores de movimiento y distancia. El dispositivo de Meta, Oculus, es un gran ejemplo.

La realidad aumentada debe considerar tu medioambiente, distancias, colores, sonidos e incrustar objetos digitales ahí. Seguro has probado simples intentos de realidad aumentada, en forma de juguete, una app que agregue filtros o un cuadro que al pasarlo por la camara de tu celular utilizando una app cobra vida con una animación. Estas interpretaciones no llegarían a ser la versión beta de lo que veremos en los próximos años.

La realidad aumentada, ejecutada al nivel de detalle para que sea atractiva para el usuario promedio o tenga aplicaciones a los negocios, es 100 veces más compleja que la realidad virtual.

Imagina que llegas a tu oficina, te colocas unos lentes discretos y translucidos, tu smartwatch ya tiene sensores, haces un movimiento y aparece la maqueta de tu nuevo proyecto inmobiliario frente a tus ojos, flotando en tu mesa, tan real que lo puedes tocar, es más, gracias a los sensores en tu reloj y cámaras colocadas en el cuarto, lo puedes manipular.

Tus colegas llegan y ven lo mismo que tú, pero también te pueden ver a ti y al medioambiente, la realidad aumentada agrega una capa a tu realidad.

Ya no necesitas televisiones en tu casa porque tu dispositivo puede crear una televisión del tamaño que gustes, donde gustes, esto sin perder contacto con tu familia ya que solo agrega la pantalla y audio sin obstruir tu visión, no cambia por completo tu realidad, todos pueden ver lo mismo.

Hace poco tuve una estimulante conversación con un buen amigo, Harsh Shah, que trabaja para Meta en San Francisco, justo en la sede de Oculus. Platicamos que el reto actual de la realidad virtual en dispositivos como Oculus es un gran desafío ya que es complejo agregar pantallas y decenas de sensores lo suficientemente ligeros y aislados del calor de los procesadores para portarlos por un periodo largo; en realidad aumentada debes crear una pantalla transparente, con la calidad suficiente para que tu realidad se aumente sin distorsión. Un reto casi imposible.

Google, hace unos años, intentó con Google Lens crear un prototipo de realidad aumentada.

El fracaso provino por varios motivos: Google no controló la percepción externa y rápidamente los portadores se hicieron fama de ridículos, la batería duraba muy poco, era molesto de portarlos, la calidad de la pantalla era baja y monocromática.

Aprendiendo de este error, varias iniciativas buscan introducir al consumidor a esta tecnología aliándose a marcas de moda, que buscarán presentarlo como Apple con su alianza con Hermés, logró posicionar al Apple Watch para fashionistas.

El metaverso será la base de la web 3.0, la evolución de la web actual. Eventualmente los smartphones serán sustituidos por dispositivos que ofrecen las mismas características con diferentes interacciones.

Estamos por experimentar una revolución tecnológica a una magnitud que no hemos experimentado en varias décadas, las empresas deben poner en su radar esta evolución para aprovechar las oportunidades que esto traerá.

Me encantaría leerte, escríbeme por mis redes sociales.

Hasta la siguiente semana, Manuel.

Manuel  Trevilla

Manuel Trevilla

Empresario, conferencista especialista en marketing digital, innovación y wellness. Mentor y consejero de organizaciones como Google Launchpad, Masschallenge y LFT.

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