Durante la segunda guerra mundial, en 1937, el gobierno britanico consideró que un ataque Nazi a Londres era una posiblidad, desde la perspectiva lógica militar era prácticamente inevitable. Winston Churchill llamó a Londres el objetivo más atractivo del mundo. Algunos pronosticaron 500 mil muertos en la primera semana del ataque.
Se consideró crear una red subterránea de albergues anti bombas, pero cancelaron el plan al predecir que las personas que entrarían, jamás querrían salir, poseídos por miedo.
El impacto en daños estructurales a la ciudad, el total colapso de la productividad en todas las industrias y el daño psicológico podría dar como resultado el colapso del país y el perder la guerra.
En 1940 los nazis, como se pronosticó, accionaron un bombardeo aéreo masivo y prolongado en Londres llamado blitz, ¿el objetivo? Destruir la moral y la economía del país al llenar a sus habitantes de miedo.
Fueron 9 largos meses con más de 40,000 civiles fallecidos, y miles más heridos. Los peores pronósticos del gobierno britanico se habían cumplido.
Excepto, que la respuesta de la población no fué la esperada, el pánico no llegó, los hospitales psiquiátricos no fueron utilizados, mucha gente se exilió, pero las personas necesarias para mantener la ciudad operando y la economía funcionando permanecieron en la ciudad, haciendo su trabajo.
Eventualmente Hitler decidió enfocar sus esfuerzos en Rusia.
Este efecto, puede parecerse a situaciones actuales como la respuesta de muchos países en 2022 durante la pandemia de COVID o la respuesta valiente y constante de la población ucraniana en respuesta al ataque de Rusia; definitivamente no era lo que Moscú esperaba.
Dr. MacCurdy fue inspirado por la reacción de la población en Londres y en su libro The Structure of Morale, explica con más detalle la siguiente teoría:
“La moral de la comunidad depende de la reacción de los sobrevivientes...” …Es evidente que los muertos no transmiten pánico”
Divide a la comunidad afectada en 3:
- Golpe directo: Fallecidos
- Falla cercana: Sienten bombardeo, ven la destrucción, afecta sus vidas, posiblemente heridos. Sufren las consecuencias del impacto.
- Falla remota: Escuchan sirenas, ven el estallido, pero las consecuencias son nulas o mínimas.
Este último grupo, después de 1-2 ocasiones, salen con un sentimiento de emoción, inmunes al miedo ocasionado por el bombardeo, se sienten inmortales, pierden el miedo a los ataques. Continúan su vida y se adaptan.
La idea de que un inconveniente o situación difícil genera la misma respuesta en todos es falsa. Y entender eso también afecta tu forma de reaccionar a los retos.
Si usamos una perspectiva estoica de las dificultades, son una oportunidad de mejorar, aprender, demostrarte que puedes y al final, perder el miedo porque saliste victorioso.
Dislexia, es un gran ejemplo, es evidentemente una dificultad para quien lo padece, no pueden leer o aprender con la facilidad de los demás, existe una proporción mayor de personas con dislexia en la cárcel por ejemplo.
Pero también es una realidad que hay muchos que tuvieron una adaptación positiva a esta dificultad, los hizo más fuertes y les dio una ventaja a la larga. Empresarios como Richard Branson la describen como “una forma diferente de pensar” que lo ayudó a ser exitoso. Igualmente, muchos creen que Albert Einstein era dislexico pero no se le realizó una prueba durante su vida, no existía.
Los disléxicos aprenden a memorizar pasajes de libros para al leer en voz alta y no ser ridiculizados, son flexibles en su manera de pensar, son ágiles hablando en voz alta, son más propensos a buscar soluciones creativas, a pensar rápido, en pocas palabras si su actitud y ecosistema es el adecuado, su forma de compensar esa debilidad, les genera una ventaja competitiva.
Durante COVID muchas empresas tuvieron que cerrar, pero muchas industrias se simplificaron, flexibilizaron y encontraron maneras mejores de operar. La vacuna puede ser un tema delicado para muchos, pero el avance generado en tecnología CRISPR y MRNA para crear la vacuna de COVID se utilizará para curar VIH, Cáncer y aumentar la longevidad.
Recuerda, si crees que no puedes superar un reto, estás en lo correcto, pero si crees que puedes salir victorioso, también estás en lo correcto.
En este texto escribí sobre el Locus de control, el locus de control es el grado en el cual las personas perciben que ellos, más allá de factores externos, tienen el control sobre los resultados de los eventos en su vida.
Las personas con un locus de control interno, es decir creen que controlan su vida, son más exitosas, felices y hasta viven más.
Tu mente afecta tus acciones, maximiza tus oportunidades, mira los retos como aprendizajes, no como situaciones paralizantes.
Hasta la próxima semana, Manuel.
