En México, hay productos que las instituciones bancarias están obligadas a ofrecer por ley sin costo alguno para el usuario y que muy pocos conocen, tal es el caso de las tarjetas de crédito básicas.
La Ley de Instituciones de Crédito en el artículo 48 Bis 2 expone desde hace seis años que las instituciones financieras que tienen tarjetas de crédito en su cartera de productos, están obligadas a ofrecer la de crédito básica.
Si un banco no lo hace, estaría incumpliendo con lo ordenado en la ley, expuso Mónica Martínez Torres, directora de Evaluación de Productos de Captación y Crédito de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
Ya sea que estés en busca de tu primera tarjeta de crédito y no quieras pagar anualidad ni comisiones, o bien seas un cliente totalero que no tiene interés en obtener puntos ni recompensas y sólo la utilices como medio de pago para tener un historial crediticio, esta tarjeta puede ser buena opción.
De acuerdo con fuentes del sector bancario, aún en los principales bancos del país la circulación promedio que se tiene es de 300 plásticos de este tipo por institución.
En total se estima que hay menos de tres mil tarjetas de crédito básicas en el mercado.
Como cualquier otro crédito se deben cumplir los requisitos básicos como comprobante de ingresos y de domicilio, identificación e historial crediticio.
La finalidad de estas tarjetas básicas será sólo la adquisición de bienes y servicios; no es posible retirar efectivo de ellas. Tienen un límite de crédito de 12 mil pesos.
En la mayoría de los casos, se reconoce que existe falta de conocimiento tanto del cliente como del ejecutivo bancario, lo cual hace que éstas no sean solicitadas.
Martínez Torres detalló que la ley marca que las instituciones de crédito que reciban depósitos bancarios de dinero a la vista por parte de personas físicas, estarán obligadas a ofrecer un producto básico bancario de nómina, de depósito o de ahorro.
Asimismo, las instituciones de crédito que otorguen a personas físicas aperturas de crédito en cuenta corriente asociadas a tarjetas de crédito, estarán obligadas a mantener a disposición de sus clientes que sean elegibles como acreditados, un producto básico de tarjeta de crédito bancaria.
La finalidad de esas tarjetas de crédito será únicamente la adquisición de bienes o servicios y tienen la característica de que el límite de crédito es de hasta 200 veces el salario mínimo general diario vigente en el Distrito Federal, esto es alrededor de 12 mil pesos.
Además, estarán exentas de comisión por anualidad o cualquier otro concepto y las instituciones no estarán obligadas a incorporar atributos adicionales a la línea de crédito de ese producto básico.
Un estudio sobre el Uso de las Tarjetas de Crédito de la Fundación de Estudios Financieros, señala que el 36 por ciento de las personas que solicita un plástico es porque necesita una mayor línea de crédito; 16 por ciento porque buscaba tener otra tarjeta por si se la robaban o clonaban y 14 por ciento para tener un mejor historial crediticio.
Sin embargo, al igual que cualquier otro producto de crédito, Martínez Torres explicó que el futuro acreditado debe tener un historial crediticio sin problemas, presentar comprobantes de ingresos, ya sea como trabajador asalariado o independiente y comprobante de domicilio.
De reunir estos requisitos no tendría por qué ser negado un plástico de este tipo.