Monterrey

Javier Amieva: México y Centroamérica: Indiferencia migratoria y clima de ingobernabilidad

¿Qué está pasando en la frontera?.

El formato de enfrentar las problemáticas migratorias, económicas y de la pandemia en México, refleja a los estadounidenses la clara idea de que los gobiernos de México y la región de Centroamérica, no sólo están manejando erróneamente estas situaciones sino que existe un clima de ingobernabilidad y que esto representa un reto para la actual administración Biden.

Un ejercicio que cada año despliega el Texas Tribune mediante conferencias públicas de alto nivel ha difundido que contrario a las respuestas de Trump hacia los inmigrantes y de los convenios que hizo con México para que hiciera suyo el problema, Biden y los líderes demócratas desean resolver la situación, aun a costa de perder capital político.

A pesar de que decenas de Senadores la mayoría Republicanos han visitado la frontera Sur de Texas para ver por ellos mismos el grado de “crisis” que existe en la frontera y denunciarlo como un gran problema para Estados Unidos; el presidente Joe Biden ha respondido ante esto que desplegará a FEMA, la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias y repuesta en casos de desastre. FEMA cuidará a adolescentes y niños que a diario cruzan la frontera en números récord ante la indiferencia de las autoridades mexicanas y que son carne de cañón para criminales que pululan en la frontera norte de México y viven de la explotación y comercio humano así como del tráfico de drogas.

El despliegue de FEMA es una respuesta y apoyará a lo que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) llamó un esfuerzo gubernamental de 90 días en la frontera, donde la administración de Biden está luchando por cuidar la salud y el bienestar de adolescentes y niños que llegan sin sus padres, con uno de ellos o simplemente son abandonados en la frontera por padres y “coyotes” para que sean auxiliados por la patrulla fronteriza.

Los menores están llegando a un ritmo que supera con creces la capacidad de las autoridades para albergarlos; pero aun así, por ejemplo en marzo cruzaron 19mil menores que están en custodia de la autoridades; “esta cifra representa una gran disposición humanitaria.

“El gobierno federal está respondiendo a la llegada de un número récord de personas, incluidos niños no acompañados, a la frontera suroeste”, dijo el DHS en un comunicado

El creciente número de migrantes que buscan asilo en la frontera entre Estados Unidos y México puede explicarse por la pobreza, la violencia y el cambio climático, según la legisladora federal Verónica Escobar, una demócrata de El Paso. “Hasta que abordemos esto estratégicamente con humanidad y compasión, y pensando en todo nuestro hemisferio, estaremos teniendo la misma conversación todos los años”, dijo Escobar.

¿Qué está pasando en la frontera? De acuerdo al Texas Tribune, Jim Darling, el Alcalde de McAllen Texas expresó que “en esta ciudad que espera ver un aumento de migrantes en las próximas semanas, y que esto representa un obstáculo adicional para el control del COVID-19 y la cuarentena necesaria. Esto dijo, Darling, “Ha sido un pequeño desafío, pero podemos manejarlo; ya estábamos listos para ello”.

Escobar por su lado dijo que es frustrante ver al creciente número de personas que cruzan la frontera y que han sido etiquetadas “como un nuevo problema” cuando las personas han estado llegando durante casi una década con la necesidad de escapar de situaciones imposibles de vivir. El Paso ha visto personas, niños y familias que buscan refugio y que a menudo tienen familiares que ya viven o trabajan en Texas. “Tenemos mucho trabajo por hacer”, dijo la congresista. “Este no es un desafío que desaparecerá por sí solo”.

¿Qué está provocando que la migración se dispare en la frontera de Texas? Escobar dijo que en general, el aumento de la inmigración se puede explicar por la pobreza, la violencia y la catástrofe climática. Muchas personas están siendo expulsadas de la tierra donde vivieron y cultivaron durante generaciones debido a sequías, huracanes u otras calamidades.

“La administración Biden debería convocar una cumbre hemisférica para discutir los temas que están impulsando el aumento de la migración no articulada y planeada, porque afecta a todos. Todos compartimos una obligación en este hemisferio y la responsabilidad de hacer esto juntos”. También denunció, que ha habido un aumento de solicitantes de asilo específicamente de México debido a la inestabilidad económica y la violencia creciente en México.

El alcalde Darling dijo que la gente viene de México debido a la violencia y buscando oportunidades laborales, y cuando trabajan en Estados Unidos y envían dinero a casa, esto ayuda a estabilizar la economía.

¿Qué están haciendo los gobiernos federal y estatal en respuesta? ¿Qué más se puede hacer para abordar la situación? El alcalde Darling dijo que las instalaciones fronterizas deberían tener trabajadores sociales en lugar de solo funcionarios del Departamento de Seguridad Pública que no están capacitados para cuidar de niños o brindar apoyo de salud mental.

“Si hablas con la persona promedio de la patrulla fronteriza, se sienten miserables, no están haciendo lo que se supone que deben hacer”, respondió Darling.

La congresista Escobar dijo que otras dos leyes, la Ley DREAM y la Ley de Modernización de los Trabajadores Agrícolas, también serán un paso en la dirección correcta para que la administración Biden aborde la situación. “El número de familias centroamericanas que huyen ha aumentado constantemente en los últimos dos años”.

“La estrategia de la administración Trump ha sido expulsarlos, y básicamente decirle al público estadounidense que si están fuera de su vista y fuera de la mente, ya no es nuestro problema; Pero eso no significa que dejarán de llegar, simplemente se convirtieron en ... el problema entre comillas de otra persona “.

Greg Abbott, el gobernador Republicano partidario de Trump, sigue tratando de hacer parecer este “approach” humanitario representa un peligro para la Unión Americana y ha hecho todo lo posible para terminar con la ayuda aunque tenga que sacrificar el bienestar de los texanos.

Ambos de los exponentes ante el Texas Tribune, Darling y Escobar coincidieron en que mediante presupuestos federales otorgados ya, FEMA en el pasado inmediato, ha estado lista para reembolsar los costos asociados a municipios y organizaciones que han aportado ayuda al abordar la situación, pero el gobernador y el Departamento de Seguridad Nacional lo han bloqueado .

A principios de marzo, la administración Biden ofreció a Abbott presupuesto específico para proporcionar ayuda centrada en realizar pruebas COVID-19 y poner en cuarentena a personas y familias. Abbott rechazó la ayuda, acusando a la administración de Biden de “liberar a inmigrantes en el sur de Texas que han estado exponiendo a los texanos a la pandemia”.

“El gobernador -Abbott-, dijo: ‘No reembolsaremos nada a través de FEMA porque creemos que simplemente esto alienta a que más de este tipo de personas vengan a buscar asilo’”, precisó Darling. Dijo que debería ser responsabilidad del gobierno federal financiar las pruebas de COVID-19 y los esfuerzos de cuarentena; pero Abbott lo ha rechazado.

Por lo que hace a la frontera mexicana en los controles sanitarios para las colonias de desplazados o “migrantes en espera”, que aceptó AMLO en acuerdo con Trump, los gobiernos municipales de Tamaulipas, Nuevo León y Coahuila dicen que simplemente no hay ningún tipo de soporte y los migrantes han sido abandonados, aunque se sabe que en la frontera sur de México se están haciendo esfuerzos por detener la ola migratoria, esto no resuelve ni hoy ni en el futuro la problemática.

Las autoridades de México están muy ocupadas con las próximas elecciones como para preocuparse de este tipo de problemática.

Esta es una columna de opinión. Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad únicamente de quien la firma y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.

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