Nuevo León (NL) cuenta con las credenciales y el personal técnico y profesional para captar las oportunidades, en cuanto a sustitución de importaciones y procesos de manufactura, que abre en la industria automotriz el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), consideró Eduardo Javier Solís Sánchez, consultor y ex presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).
“NL tiene una ventaja muy grande que es el tema educativo, tiene la preparación, al sistema educativo formal perfectamente vinculado con las empresas y, tiene una ventaja sobre estados que apenas están organizándose para llevar a cabo estas tareas”, explicó Solís Sánchez.
Agregó que, “Además, como entidad ha avanzado muchísimo en educación técnica y profesional y tiene las credenciales para poder que estas oportunidades, por el lado de los efectos globales y reglas de origen más estrictas, pero también hablando de los procesos de manufactura como maquinado, forja, fundición, inyección de plástico, estampado, moldes y herramentales (…) podemos hacerlas en México y Nuevo León tiene las capacidades”.
Comentó que los clústeres como el automotriz y el de herramentales jugarán un papel fundamental junto con las Secretaría de Economía en el tema de organización.
El experto explicó que, gracias a la nueva regla de origen del T-MEC que es más estricta que la que se tenía en el TLCAN, el mercado potencial estimado para sustituir las partes que no provienen de la región es de poco más de 35 mil 409 millones de dólares.
Mientras que, “la oportunidad en procesos es de 63 mil 056 millones de dólares, que es lo que hoy estamos importando. Entre los procesos más importantes están: maquinado, forja, fundición, inyección de plástico, estampados, moldes y herramentales”.
Por otro lado, señaló que la industria automotriz, aún sufre los efectos de la pandemia ya que, por ejemplo, al comparar el periodo de enero a agosto de 2019 con el de 2021, la producción de autos cayó 22.3 por ciento, las exportaciones bajaron 21.9 por ciento y las ventas nacionales se desplomaron 20.3 por ciento.
“Las cifras no se han logrado recuperar. Traemos el efecto brutal de la pandemia, sería un error decir que esta caída que traemos es el resultado del tema de los semiconductores (…) el que se declarara (a la industria automotriz) como esencial, no significa que eso les trajo dinero a los bolsillos de todos los compradores de autos nuevos.
“El dinero en los bolsillos de los compradores de autos nuevos, está relacionado con la situación económica y hay un efecto de la incertidumbre en la compra de autos nuevos, tiene un efecto importante porque es un bien durable, cuando hay incertidumbre se pospone la compra de autos nuevos y, lo estamos viendo en las cifras”, puntualizó.