La promulgación de la Constitución de 1857, en este documento, no se estableció ningún derecho hacia la clase trabajadora, en esa época, a los trabajadores no se les permitía ningún tipo de afiliación incluyendo la formación de asociaciones sindicales. Cualquier persona que liderara alguna causa o beneficio hacia esta clase, terminaba encarcelado y en el peor de los casos asesinado.
A pesar de lo peligroso de la época, bajo la clandestinidad lograron subsistir algunas incipientes organizaciones sindicales, los precursores de las mismas eran extranjeros, el griego Plotino Rodacanati, además de un colombiano, un español y un pintor mexicano. Estas asociaciones radicaban la ciudad de Guadalajara, Jalisco.
Por otro lado, existía un grupo eclesiástico, el cual organizaba reuniones buscando principalmente apoyar a los trabajadores del campo, estas eran llamadas semanas agrícolas, la idea era orientar a las personas sobre sus derechos laborales además de dar apoyos, como despensas y préstamos en efectivo.
Aquí, en Nuevo León a principios del año 1900 estaba establecida en La Fama una empresa de inversión alemana, dicha sociedad otorgaba beneficios a los trabajadores como despensas y en algunos casos vivienda.
En 1914 se formó una organización llamada “La Casa del Obrero Mundial”, auspiciada por varios líderes sindicales mexicanos, la cual duró solo algunos meses y fue cerrada por convencimiento ($) del gobierno de esa época. Un argumento para su cancelación pudo haber sido la próxima promulgación de la nueva constitución de 1917 que incluye ya “El Artículo 123″, que regula las bases para la libertad de la asociación sindical. Así, en 1931 nace La Ley Federal del Trabajo permitiendo la formación de las grandes centrales obreras en México.
La primera organización sindical en establecerse, en nuestra nación fue La Confederación Regional de Obreros de México (CROM), teniendo como líder a Lombardo Toledano, quien confiando en su poder, él trata de llegar a la candidatura de la presidencia de la república, aquí hay que recordar que la gente que lo apoyó en esos años usó las siglas de la central para mofarse de los políticos de la época: “Como Roba Oro Morones” y a la inversa “Más Oro Roba Calles”. En ese entorno, la pretensión del líder Toledano incomodó a los gobernantes vigentes, provocando que ellos dirigieran su apoyo a Fidel Velázquez, quien creó una nueva organización denominada Confederación de Trabajadores de México (CTM).
La ley laboral establece que los dirigentes sindicales solo podrán dirigir la organización, máximo dos períodos, sin embargo, en la práctica dejaban el cargo hasta su muerte. Esos eran tiempos de mucha armonía entre líderes sindicales y gobernantes, provocando la distorsión de los preceptos que dieron origen a las leyes laborales, en detrimento de la base trabajadora y las fuentes de trabajo usando como argumento: “La defensa de los derechos de los trabajadores”.
Así, Hasta el año 2012 los contratos colectivos de trabajo incluían en su cuerpo una cláusula de exclusión que consistía en evitar la renuncia del trabajador al sindicato administrador de la base laboral de la empresa, y si alguien intentaba dejar de pertenecer al mismo, se le despedía sin recibir la indemnización de ley correspondiente, violando totalmente sus derechos ganados por su desempeño laboral.
Las organizaciones sindicales durante mucho tiempo llegaron a tener el control absoluto de la base trabajadora, lo cual, ha estado cambiando recientemente, organizaciones como la OIT entre otras, han buscado evitar clausulas restrictivas como la de exclusión, eliminada de Los Contratos Colectivos de Trabajo…
Continuará….
¡Hasta la próxima!