La falta de condiciones por parte de los reguladores, el entendimiento del concepto y el poco impulso que se le ha dado, es uno de los retos que está enfrentando la adopción de la economía circular en el país, consideró Eduardo Aguiñaga, profesor y director del programa Full Time de EGADE.
Dijo que, si bien es un tema aún naciente, se requiere de la participación de todos los actores porque la finalidad es que la economía se vuelva, además de ecoeficiente, eco efectiva con un mayor impacto positivo en los recursos naturales.
Resaltó que alrededor de 20 empresas y organizaciones, entre ellas Arca Continental (AC), con Petstar y Heineken, ya adoptaron el modelo, sin embargo, aún falta mucho por hacer.
“Las empresas grandes ya voltearon a ver el concepto desde hace años, a veces por decisión propia o por estrategia (…) el concepto es aplicado en todos los niveles, desde empresas multinacionales, mipymes, emprendedores y hasta el mismo consumidor”, resaltó.
Entre los sectores productivos que tienen un mayor potencial para implementar el modelo están el de electrodomésticos, la minería, la construcción y la manufactura principalmente en el tema logístico.
“Creo que lo saben y poco a poco lo están implementando (…) mi apreciación es que aquí en Nuevo León (NL) se le ha estado dando un poco más de foco a este tema, veo cada vez más empresas e incluso instituciones enfocadas en empujar este tema”.
De acuerdo con el Gobierno Federal, los principios de este modelo están basados en eliminar residuos y contaminación desde el diseño, mantener productos y materiales en uso y regenerar sistemas naturales.
“Esta perspectiva lo que busca es ser mucho más creativo a la hora de implementar esto y que seas tanto socialmente inclusivo y accesible para la gente, pero que sea también ambientalmente recuperable”.
Cabe destacar que el 17 de noviembre del 2021, el pleno del Senado de la República aprobó el proyecto de decreto por el que se expide la Ley General de Economía Circular para México.
Los expertos indican que la economía circular suele definirse como un sistema económico diseñado con la intención de extraer el máximo provecho de los recursos y generar el mínimo de residuos para su eliminación.
Actividades relacionadas con reducción, reutilización y reciclaje de recursos son las que normalmente describen la realidad operativa de la economía circular.
“Dicho de una forma muy simple, una de las aspiraciones de la economía circular es que los procesos de producción eliminen el concepto de desperdicio; lo que se convierte en desecho en una parte del proceso, debería convertirse en un insumo para otra parte del proceso”, señala un experto de la UANL.