Durante 2021, un total de 10.8 millones de hogares en México fueron víctimas de algún delito, lo cual representa casi un tercio (29.2 por ciento) de las familias de México, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) 2022, dada a conocer recientemente por el INEGI.
En términos individuales, 22.1 millones de mexicanos mayores de 18 años fueron víctimas de la delincuencia durante el año pasado. Lo cual nos da una tasa de 24 mil 207 víctimas de la delincuencia por cada 100 mil mexicanos (y mexicanas) adultos.
La misma fuente indica que durante el año pasado se cometieron en México un total de 28.1 millones de delitos, lo cual representa la suma de 30 mil 786 actos delictivos por cada 100 mil habitantes del país.
En cuento a los delitos más frecuentes, el principal es el robo o asalto en la calle o transporte público, con el 21.4 por ciento de los casos, seguida por el fraude y la extorción, con el 19.2 y 17.5 por ciento.
La ENVIPE informa también que durante 2021, a nivel nacional, se estimaron 63 131 secuestros a algún integrante del hogar. Estos delitos afectaron a 60 mil 716 víctimas.
En cuanto a los costos de la delincuencia, durante 2021, el costo total a consecuencia de la inseguridad y el delito en hogares representó un monto de 278.9 mil millones de pesos. Lo anterior se traduce en 1.55 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), lo que equivale a 7 mil 147 pesos por persona afectada por la inseguridad y el delito.
La EVVIPE muestra también que la llamada “cifra negra”, o sea, los delitos no denunciados ascendió al 93.2 por ciento de los casos ocurrido en el periodo en cuestión.
En cuento a las razones para no denunciar, las principales fueron que es una pérdida de tiempo, desconfianza a la autoridad, trámites largos y difíciles, actitud hostil de las autoridades y miedo a ser extorsionados.
La inseguridad fue señalada en primer lugar entre los temas que causan mayor preocupación entre los ciudadanos, el 16.2 por ciento lo manifestó así, seguida por el aumento de precios y el desempleo.
La inseguridad afecta también las perspectivas de crecimiento de la economía mexicana.
En la última encuesta que levanta el Banco de México entre analistas del sector privado, la inseguridad fue señalada por el 13 por ciento de los analistas consultados, siendo la causa principal que pueda obstaculizar el crecimiento del país en el corto plazo.
Este es un ejemplo más de que la política de “abrazos, no balazos” seguida por la actual administración es un rotundo fracaso, ya que no ataca uno de los principales problemas del país y de la población mexicana
Magro crecimiento del Norte
La región Norte de México registró un crecimiento de apenas 0.8 por ciento en el segundo trimestre de 2022, de acuerdo con el Reporte sobre las Economías Regionales, dado a conocer recientemente por el Banco de México. De acuerdo con la clasificación del Banco de México, la región norte incluye: Baja California, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Sonora y Tamaulipas.
El sector más dinámico de esta región durante el segundo trimestre de 2022 fue el turismo, que registró un crecimiento de 11.6 por ciento, seguido por el comercio y las manufacturas que tuvieron tasas de 1.1 y 1.0 por ciento en el periodo mencionado. En cambio, en la minería y la construcción se registraron disminuciones de 4.7 y 2.4 por ciento en el segundo trimestre del año.
En general el desempeño de la economía fue bastante pobre en el segundo trimestre con un crecimiento global de 0.9 por ciento. Las regiones más dinámicas fueron el Centro Norte y el Sur, con tasas de 1.5 y 1.2 puntos porcentuales.
La región Centro Norte incluye Aguascalientes, Baja California Sur, Colima, Durango, Jalisco, Michoacán, Nayarit, San Luis Potosí, Sinaloa y Zacatecas, mientras que la región Sur está integrada por: Campeche, Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán
El autor es economista de la UANL, con Doctorado en la Escuela de Graduados de Administración y Dirección de Empresas (EGADE) del ITESM. Es profesor de la Facultad de Economía de la UANL y miembro del SNI-Conacyt.