Monterrey

Jorge Manjarrez: Alerta ambiental

¿Qué necesitamos para darle prioridad al medio ambiente?

Durante los dos meses y medio del presente año, el Gobierno del Estado ha emitido cuatro alertas ambientales para el Área Metropolitana de Monterrey (AMM) para activar la fase de alerta del Programa de Contingencias Atmosféricas por altas concentraciones de partículas menores a 10 micrómetros (PM 10).

La última fue el domingo 12 de marzo y en el boletín de comunicación se destacan las acciones que deben realizarse para “evitar emisiones de partículas contaminantes y evitar riesgos a la población”. Entre estas se encuentran las relacionadas con la industria, la construcción, los vehículos automotores y la quema de basura.

Es destacable que en todos los casos se especifica que las diferentes acciones deberán ser vigiladas según las autoridades competentes ya sea del ámbito federal, estatal o municipal. Esto significa que la autoridad federal debe vigilar las industrias, construcciones, vehículos, etcétera, del orden federal; la estatal las estatales y la municipal las municipales; pocas veces se ve tan clara en nuestro País, la división entre las competencias de los tres niveles de gobierno.

Al respecto sería interesante dar a conocer a la comunidad el registro de entidades contaminantes sujetas a vigilancia, la autoridad responsable de cada una de ellas y quién y cómo coordina las acciones de los tres grupos de tan importantes vigilantes.

Asimismo, transparentar el mecanismo mediante el cuál se activan las cuadrillas o grupos de inspectores, el equipo y la capacitación con la que cuentan, las acciones tomadas contra los infractores, los horarios en los que se actúa y, sobre todo, el número de personal que entra en acción y a quién rinde cuentas.

Por ejemplo, en el caso estatal se emitió el siguiente comunicado: “Con motivo de la declaración de Alerta Ambiental, el día de hoy, personal de la Procuraduría Estatal de Medio Ambiente, se desplegó a varios puntos estratégicos de la zona metropolitana, con el objeto de verificar que las fuentes contaminantes de competencia estatal lleven a cabo acciones adicionales para minimizar la emisión de partículas al ambiente, durante el desarrollo de sus actividades.”

Sólo de este párrafo surgen preguntas cómo: ¿A qué hora iniciaron el despliegue?, ¿Cuántos elementos se desplegaron?, ¿Qué equipo utilizaron?, ¿A qué puntos estratégicos llegaron?, ¿Cuáles fueron las fuentes contaminantes revisadas?, y ¿Cuáles fueron las acciones realizadas, los resultados obtenidos y, en su caso, las sanciones?

Difundir esta información daría mayor tranquilidad a la sociedad sobre lo que nuestras autoridades, respetuosas de las competencias de cada uno de los tres niveles de gobierno, realizan de manera rápida, efectiva y coordinada para “evitar emisiones de partículas contaminantes y evitar riesgos a la población”.

Más allá de la relevancia de esta información, es necesario declarar al AMM en Alerta Ambiental Permanente, toda vez que la contaminación está incontrolable e intensificada, el lunes pasado, con el olor a azufre que invadió a diversos municipios; olor cuya fuente permanece sin identificar.

Es impostergable realizar acciones efectivas inmediatas, correctivas y preventivas, para frenar la grave contaminación ambiental que tristemente nos sitúa entre las áreas metropolitanas más contaminadas del país por arriba de Guadalajara, Toluca, Puebla y León.

Sobre la mesa están los temas relacionados con la refinería de Cadereyta, las pedreras, calidad del diésel y la gasolina, mejorar y ampliar el transporte público, los más de 2 millones de vehículos que circulan por el AMM, incendios, quema de basura y empresas contaminantes, entre otros.

Como lo señaló el neumólogo Dr. Uriel Chavarría, “la contaminación es un verdadero problema de salud pública que requiere de una revolución de conciencias”.

Nuevo León se parece a los cultivos de temporal: para limpiar el aire necesitamos de un frente frío; para tener agua, de un huracán; para disminuir el tráfico vehicular, la pandemia; ¿qué necesitamos para darle prioridad al medio ambiente?

Si la sociedad, las universidades, empresas y gobierno no actuamos de manera inmediata y coordinada, seguiremos, como dice el Dr. Chavarría, “como corderitos yendo al matadero”.

El autor es economista, demógrafo y politólogo. Profesor de la Universidad Autónoma de Nuevo León.

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