Se ha llegado el momento a las personas físicas de cumplir con la obligación de presentar la declaración anual de ISR (Impuesto sobre la Renta), lo cual para algunos puede ser una buena noticia ya que conocen las reglas del juego; sin embargo, para otros aunque no es algo nuevo, desconocen el trasfondo de la misma, por lo que aprovecharé las siguientes líneas para abordar el tema.
Hay varios factores a considerar al momento de presentar la declaración anual, uno de ellos es el tipo y número de fuentes de ingreso que se tiene; lo anterior es relevante porque en la declaración anual se juntan prácticamente todos los ingresos percibidos en el año (con algunas excepciones) y se le aplica una tarifa progresiva, por lo que entre mayor sea el ingreso anual, mayor será el impuesto. “¿Qué dijo?” (seguramente fue su pensamiento), permítame explicarme con el siguiente ejemplo, ISRael tiene 2 empleos uno como ejecutivo en una empresa donde recibe un sueldo rojo y otro como maestro, compartiendo conocimientos y experiencia adquirida, ahí le pagan un sueldo azul. Al final del año el total de sus ingresos es rojizo oscuro (90% rojo y 10% azul), el ingreso rojo paga un impuesto del 30% y el ingreso azul del 10%, al juntarlos y formar rojizo oscuro, el azul al convertirse en un tono rojizo debe pagar un impuesto del 30%, de los cuales ya pago una parte a lo largo del año así que en la declaración anual pagará el resto.
Ahora supongamos que Justino tiene locales de arrendamiento, su ingreso mensual promedio es azul; en el transcurso del año presto de manera extraordinaria un par de asesorías en materia de comunicación recibiendo un ingreso rojo. Al final del año sus ingresos fueron azul oscuro (85% azules y 15% rojos), los ingresos rojos tomaron un tono azul, por lo que Justino en su declaración anual tendrá un saldo a favor.
La mayoría de los ingresos que reciben las personas físicas causan impuesto al momento de obtener el ingreso y se consideran como pago a cuenta del impuesto anual, lo anterior significa que si resulta impuesto a cargo en la declaración anual, el ISR pagado durante el año no fue suficiente para cubrir el impuesto anual. Esto en primera instancia nos haría pensar que se cometió algún error en el transcurso del año, aunque esto es una posibilidad, la gran mayoría de las ocasiones se debe a casos como el de ISRael, haber percibido varios ingresos durante el año.
El otro factor a considerar en la declaración anual son las deducciones personales, las cuales son gastos que la ley fiscal permite incluir en la declaración anual, al hacerlo en el caso de ISRael le permitirá disminuir el impuesto a cargo o incluso obtener un saldo a favor y en el caso de Justino incrementará el saldo a favor de ISR. Dentro de las deducciones personales se encuentran los intereses de créditos hipotecarios para casa habitación, cuya deducción está relacionada con la tasa de inflación anual. En términos generales mientras la tasa de interés del crédito hipotecario sea superior a la tasa de inflación se tendrá una deducción, ya que existe una relación directa entre la tasa de interés del crédito hipotecario y la tasa de inflación, al disminuir la diferencia entre ambas, así también lo hará la deducción. Esta diferencia, el interés real deducible, es el monto que se podrá considerar como deducción personal, la cual es calculada por la institución que otorga el crédito hipotecario.
Es importante notar que la inflación se ha incrementado en los últimos años, por lo que no es de extrañar que el monto a deducir en la declaración anual por concepto de intereses de crédito hipotecario sea menor en comparación a años anteriores.
Estimado lector, espero las líneas anteriores le ayuden a entender la esencia y el propósito de la declaración anual, al igual le permita ser proactivo y realizar las acciones que le permitan disminuir el impuesto a cargo o en el mejor de los casos obtener un saldo a favor.