Dese hace algunos días ha aparecido en todos los noticieros información sobre la actividad del volcán Popocatépetl. Una de las notas de este suceso que más me llamaron la atención trataba sobre la logística que se implementa para evacuar a las personas que vivían en los poblados cercanos al volcán.
Al terminar de leerla lo primero que pensé fue: “¿a quien se le ocurre vivir cerca de un volcán? Digo, sí entiendo que un volcán hace erupción en muy pocas ocasiones, pero siempre existe una posibilidad de que pueda suceder. Supongo que tú, al igual que yo, pensarías que, a la hora de decidir dónde vivir, lo más lógico sería elegir una zona donde no puedas ser visitado ocasionalmente por la lava.
Casualmente, justo después de las noticias del Popocatépetl, me apareció una nota sobre Chat GPT; esta nueva modalidad de inteligencia artificial que se ha vuelto muy popular.
Para los que no saben, Chat GPT es una herramienta parecida a un chatbot que puede responder una infinidad de preguntas y ayudarte con tareas de forma casi automática.
De hecho, para efectos de desarrollar este artículo, le pregunté directamente a Chat GPT sobre ¿qué era Chat GPT? y le pedí que me diera ejemplos concretos de cómo puede ayudarnos. Resumiendo, respondió lo siguiente:
Chat GPT puede responder cualquier pregunta que tengas ya sea de temas de historia, ciencia, geografía, cultura pop y más. Puede hacer en cuestión de segundos ensayos muy completos del tema que quieras. Puede hacer traducciones de texto de un idioma a otro. Puede ayudarte a redactar correos electrónicos, publicaciones de blog o incluso crear fragmentos de código para hacer sitios web. Puede ayudarte con cálculos matemáticos. Incluso, con la inteligencia artificial, ya se pueden sacar imágenes ficticias pero muy realistas como las que dieron la vuelta al mundo del Papá Francisco vistiendo atuendos de Balenciaga. Pueden hacerse canciones electrónicas, poemas, historias y hasta campañas publicitarias gráficas.
Con sólo leer el párrafo anterior te darás cuenta que este tipo de herramientas van a impactar a miles de empleos, ya que podrán hacer de manera automática tareas que ahora son responsabilidad de profesionistas en la industria publicitaria, de investigación, musical, legal, artística, literaria, educativa entre muchas otras.
Tal vez te preguntarás; ¿qué tiene que ver esto con el Popocatépetl? A mi manera de ver las cosas, podríamos decir que la inteligencia artificial, es como una erupción tecnológica y así como la actividad de un volcán puede afectar a hogares y poblados cercanos, en este caso, herramientas como Chat GPT, Google Bard, o Jasper.ai, afectarán a muchas profesiones. Entonces; ¿la llegada de la inteligencia artificial, pondrá en riesgo tu trabajo? Depende a qué te dediques, pero es posible. ¿Dejará a personas sin empleo? Sí, eventualmente.
Ahora veamos; si tú te enteraras que un volcán cerca de ti pronto hará erupción, seguramente actuarías con mucha rapidez y buscarías estar a salvo y hacer todo lo posible para alejarte lo más lejos posible lo más pronto posible. Pero, en cuanto a la erupción de la inteligencia artificial que está más cerca que nunca de nosotros, ¿qué piensas hacer? ¿Te quedarás inmóvil, haciendo lo mismo de siempre o buscarás tu supervivencia?
Si lo vemos con algo de optimismo, creo que estamos a tiempo para que, en caso de que la inteligencia artificial pueda alterar nuestro trabajo, entonces replanteemos nuestra estrategia profesional ya sea, eligiendo si huimos de la erupción cambiando de profesión o aprendiendo a usar sus herramientas a nuestro favor.
Quienes han trabajado en la industria de manufactura ya tienen experiencia en esto. Las máquinas robotizadas sustituyeron a muchos operadores y las personas eventualmente se las ingeniaron para adaptarse y encontrar oportunidades donde la máquina no los pudiera sustituir. Es así como surgieron tantas nuevas disciplinas como la mecatrónica, robótica, sistemas e informática, que ahora han logrado emplear a miles de profesionistas.
En el caso de las profesiones que serán afectadas por la inteligencia artificial, mi sugerencia es la siguiente: hay que dominar la herramienta, úsala a tu favor y evoluciona tus capacidades haciendo actividades adicionales a las que serán sustituidas por la nueva tecnología. Si eres un diseñador gráfico, por ejemplo, usa la inteligencia artificial para trabajar diseños gráficos con mayor velocidad y aprende nuevas aptitudes que la herramienta no puede hacer.
No hay marcha atrás. La inteligencia artificial impactará y suplirá muchas cosas de las que hacemos ahorita. Pero estamos a tiempo para detectar las primeras señales de humo de este volcán tecnológico para ver cómo usarla a nuestro favor y evitar a toda costa que la lava logre llegar a nuestra quincena.