Monterrey

Pablo de la Peña: Economía interna fuerte

Debemos de reconocer que todos los pronósticos que se hicieron a principios del año sobre el crecimiento de la economía mexicana quedaron muy por debajo de los pronósticos que tenemos actualmente para este 2023.

De acuerdo con la última actualización de la encuesta a especialistas en economía del sector privado, del Banco de México, se espera que tengamos un crecimiento de la economía mexicana del 3 por ciento, aproximadamente, muy por encima del 1 por ciento que se estimaba en enero de este año.

Recordemos que el pronóstico de la Secretaría de Hacienda para el cimiento de la economía en México en este 2023 fue precisamente del 3 por ciento, reconozco que yo era uno de los que dudaban que llegaríamos a este nivel de crecimiento. Uno de los principales argumentos por la falta de confianza en este pronóstico era la esperada desaceleración de la economía de los Estados Unidos sin embargo esta no ha llegado aún.

De acuerdo con los datos actualizados de INEGI sobre la evolución del PIB para el segundo trimestre del año, vemos que la economía en México ha mostrado un ritmo constante de crecimiento, particularmente en dos sectores; uno, en el sector industrial exportador automotriz, y dos, en el mercado interno particularmente en el sector de la construcción y el comercio al por menor.

El crecimiento anual del PIB en el segundo trimestre del 2023 respecto al mismo periodo del año pasado fue del 3.6%, las actividades primarias crecieron 1.90 por ciento, las actividades secundarias crecieron un 3.90 por ciento, y las actividades terciarias crecieron un 3.40 por ciento en términos reales.

Recordemos que el primer trimestre del 2023 la economía mexicana creció un 3.70 por ciento, es decir llevamos dos trimestres consecutivos con crecimientos cercanos al 4 por ciento en términos anuales.

Dentro de las actividades secundarias destaca el sector de la construcción que tuvo un crecimiento del 13.70 por ciento anual en este segundo trimestre del año. Sin embargo, es importante resaltar que el índice del sector construcción para junio del 2023 fue de 96.3 puntos y el mismo índice en junio del 2019 fue de 96.6, es decir apenas estamos recuperando el nivel de la actividad de construcción que teníamos antes de la pandemia.

Creo que es importante resaltar que la actividad de la construcción mostraba signos de desaceleración incluso previo a la pandemia, pues para marzo del 2020, el índice era de 85.1 puntos.

Dentro de las actividades terciarias destaca principalmente el crecimiento del sector de servicios de esparcimiento culturales y deportivos con un 47.7 por ciento de crecimiento anual. Los servicios profesionales crecieron un 10.2 por ciento; los servicios de información en medios masivos crecieron un 10.1 por ciento y el comercio al por menor creció un 5.40 por ciento.

Como podemos observar las actividades del mercado interno como el comercio y servicios muestran una resiliencia a lo largo del año a pesar de las altas tasas de interés, pero quizá sea el resultado todavía de un repunte de la economía post pandemia.

Dentro de los factores que podrían obstaculizar el crecimiento en México, los especialistas encuestados por Banxico siguen creyendo que los factores relacionados con la gobernanza como: la inseguridad, la falta de estado de derecho y la incertidumbre sobre la política interna, son los factores con mayor probabilidad de limitar el crecimiento del país.

En segundo lugar, están las condiciones económicas, como la ausencia de un cambio estructural en el país, y la falta de competencia del mercado. Y en un muy lejano tercer lugar están los factores externos, como la política monetaria de Estados Unidos.

Todo parece indicar que la economía mexicana seguirá una dinámica de relativa fortaleza inercial en el tercer trimestre, pero estaremos pendientes a ver la evolución del sector industrial de exportación que sin duda es el motor actual de la economía mexicana.

La fortaleza del tipo de cambio pesos por dólar, ya está teniendo un impacto negativo en el sector exportador de productos primarios, y creo que eventualmente tendrá un impacto negativo en los sectores de exportación de productos eléctricos y de consumo final. Por el contrario, el sector automotriz sigue respondiendo a la recuperación del mercado mundial y especialmente del mercado de los Estados Unidos, aún hay marcas que tienen entre 6 y 12 meses de espera para entregar autos nuevos.

Creo que, independientemente del ambiente político que empieza a tomar fuerza por las elecciones presidenciales para el 2024, la economía mexicana mantendrá un ritmo positivo, al menos en los últimos cuatro meses que nos quedan de este 2023.

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