Monterrey

Jesús Garza: El éxito del liberalismo económico

Los países con mayor apertura económica tienen mayores índices de prosperidad y crecimiento económico.

Recientemente una creciente cantidad de países han adoptado medidas económicas para proteger el mercado interno y obstaculizar el comercio global. Las políticas proteccionistas se dieron, principalmente, con la administración de Donald J. Trump en los Estados Unidos. La ola reciente de proteccionismo se ha implementado en otros países pensando que tienen un beneficio importante en la sociedad y economía. La realidad es que los países con mayor apertura económica tienen mayores índices de prosperidad y crecimiento económico.

El último ranking de liberalismo económico muestra que los países con mayor libertad económica son Singapur, Suiza, Irlanda y Taiwán. Los Estados Unidos se ubican en la posición 25 y México en el sitio 61. Ambos países han caído en el índice de libertad económica lo que podría perjudicar a las tasas de crecimiento futuras. Los últimos sitios del ranking, es decir, los países más cerrados o estatizados son Sudán, Venezuela, Cuba y Corea del Norte.

Los beneficios de una mayor libertad económica son evidentes. Por ejemplo, la Unión Europea se benfició al reasignar los recursos de capital y mano de obra de manera más eficiente con el fin de elevar el crecimiento potencial de la zona del euro. Así, países como Alemania y Francia se benficiaron de un influjo importante de mano de obra, mientras que los países como Italia y España, se beneficiaron un mayor influjo de capital e inversiones.

EUA ha crecido  históricamente por lo mismo al recibir una cantidad elevada de mano de obra calificada, inversiones de capital, y un comercio global que mantiene precios bajos de muchos bienes y servicios.

Es preocupante que algunos políticos quieran imponer restricciones a la política económica lo que resultaría en mayores costos de producción y por ende mayores precios al consumidor.

En México el resultado ha sido positivo. Antes de 1994, cuando se firmó el TLCAN, México era un país que dependía del gobierno y del petróleo para crecer. El nivel de desarrollo era limitado y no existía la creación de empresas privadas como sucede ahora.

Hoy en día, México depende del sector manufactutero privado para crecer y ha madurado a una economía de ingreso medio. Los estados más integrados con EUA han observado elevadas tasas de desarrollo económico y social.

Sin embargo, para lograr tasas de crecimiento aún mayores es importante incetivar la apertura de todos los sectores de la economía para incrementar la innovación y la creación de más empresas.

El autor es director general de Soluciones Financieras GAMMA y profesor de Economía y Finanzas de EGADE Business School. Tiene un doctorado en Finanzas y maestría en Economía Financiera, ambas por la Universidad de Essex en el Reino Unido. Fue el economista en jefe para México de Itau BBA, director general adjunto de Organismos Financieros Internacionales en la SHCP e investigador en el Banco de México.

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