Tenemos todas las condiciones para detonar más la economía regiomontana.
Por un lado, el anuncio de fuertes inversiones como consecuencia del Nearshoring, y, por el otro, la transición energética, un cambio en el patrón de uso de energéticos, lo cual también demandará enormes recursos monetarios.
Coincidomos con Héctor Moreira, Comisionado de la Comisión Nacional de Hidrocarburos, quien ha destacado que en conjunto con los estados del norte de México, Nuevo León debe aprovechar esta enorme oportunidad que se le presenta para detonar su desarrollo.
Aquí tenemos personal calificadogracias a distinguidas universidades, 55cruces fronterizos con Estados Unidos, 10 puertos de altura y una cercanía con el vecino país del norte que en menos de 24 horas permite el traslado de insumos y bienes terminados entre ambas naciones.
El PIB per cápita de un ciudadano de Nuevo León ronda los 20 mil dólares al año, el más alto de todas las entidades de la región norte entre ellas Chihuahua, Coahuila, Tamaulipas, Baja California, Sonora y Durango.
Y para todo el País, el Nearshoring puede representarle a México un 3 por ciento de incremento en su Producto Interno Bruto en los próximos 5 años.
Es importante que Gobierno, industria y academia logremos juntos impulsar políticas, acuerdos y acciones que pemitan capitalizar este momento único en la historia del norte del País y alcanzar ese potencial que se traducirá en mayor bienestar para nuestras familias.
Y hagamos un frente que pueda solucionar la escasez de agua en Nuevo León, y expandir la red de transmisión de energía eléctrica, insumos necesarios para la industria.