Monterrey

Pablo de la Peña: Termina el sexenio pero sigue la inseguridad

Aunque el problema de la inseguridad en nuestro país es un fenómeno generalizado, no necesariamente es igualmente intenso en todos los estados.

Creo que a nadie le queda duda de que el problema de inseguridad que vivimos actualmente en nuestro país es “el problema” que la nueva administración de Claudia Sheinbaum deberá atender con mayor urgencia. La captura de “El Mayo” no ha tenido repercusiones visibles – aún – al menos no como cuando capturaron y soltaron a Ovidio Guzmán en el 2019.

Este silencio es realmente de llamar la atención. Aunque por otro lado geográficamente se han incrementado en los últimos días las balaceras y los enfrentamientos en Tamaulipas, al punto en que la misma Secretaría de Seguridad de ese estado, recomendó a privados que contrataran su propia seguridad; clara confirmación de que el Estado ha sido rebasado por el crimen organizado, y está impactando también en la actividad económica de nuestras ciudades.

Para muchos de nosotros es claro que el problema de inseguridad ha rebasado la capacidad de respuesta, prevención y atención de la estrategia de la actual administración, menos para el presidente López Obrador, porque él siempre tiene otros datos.

Pero tomando los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública podemos analizar la evolución que ha tenido la inseguridad en nuestro país y en cada estado.

Tomando únicamente los datos de homicidios totales por año y comparando con los sexenios de Calderón y de Peña Nieto, es claro que este sexenio de López Obrador es el más inseguro, e incluso ya lo era a los cinco años de gobierno.

Según el portal de STATISTA en todo el sexenio de calderón hubo 122,319 homicidios, en el sexenio de Peña Nieto 150,451 homicidios; y con datos del mismo SESNSP al quinto año de López Obrador suman 217,004 homicidios.

En estos primeros seis meses del 2024 sumamos ya 21,900 homicidios, de mantenerse este ritmo podríamos estar cerrando el 2024 con 43,800 homicidios, de ser así, estaríamos terminando el sexenio con un total de 260,800 homicidios; esto sería un incremento del 73 por ciento respecto al sexenio de Peña Nieto y un incremento del 113 por ciento respecto al sexenio de Calderón.

Aunque el problema de la inseguridad en nuestro país es un fenómeno generalizado, no necesariamente es igualmente intenso en todos los estados. En el 2019, en el primer año de este gobierno, cuatro estados concentraban el 30 por ciento del total de 44,876 homicidios en el país, estos eran: Guanajuato, Estado de México, Baja California y Jalisco.

Sin embargo, los cinco estados con las tasas de homicidios por cada 100 mil habitantes más altas se ubicaban en Colima con 101.7, Quintana Roo 90.1, Baja California 86.3, Guanajuato 73.1, y Chihuahua con 65.7 homicidios por cada 100 mil habitantes.

Para el 2023, los estados con las tasas de homicidios por cada 100 mil habitantes más altas no han cambiado significativamente, a excepción por Morelos, Zacatecas y Chihuahua. Del total de 41,990 homicidios los cinco estados con tasas más altas de homicidios en el 2023 fueron: Colima con 114.6, Quintana Roo con 87.8, Morelos con 76.1, Baja California con 70 y Zacatecas con 62 homicidios por cada 100 mil personas.

Recordemos que la tasa de homicidios a nivel nacional en el 2019 fue de 35 y para el 2023 fue de 32. Todas estas entidades superan por el doble o el triple del promedio nacional.

El 2019 fue el año con mayor número de homicidios totales en el país en esta administración de López Obrador, con 44,876 homicidios, como ya lo comenté en líneas anteriores. En ese año para el mes de junio se tenían acumulados 22,486 homicidios, es decir el 50 por ciento de los homicidios del año ya se habían cometido en los primeros seis meses.

Interesante es ver que, en cada año, la distribución se mantiene relativamente estable; es decir, en los primeros seis meses del año se acumula prácticamente el 50 por ciento del total de homicidios del país.

De continuar esta tendencia, estaríamos superando los 44,800 homicidios en el 2024, y sería muy posible que nuevamente Colima alcance una cifra mayor a los 100 homicidios por cada cien mil habitantes, el estado de Morelos se podría ubicar en segundo lugar con una tasa superior a 85, seguido de Quintana Roo, también con una tasa superior a 80, y de Baja California con una tasa cercana a los 70 homicidios por cada 100 mil habitantes.

Finalmente, a pesar de que la tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes es una medida estándar para poder comparar de manera equivalente en función de la población de cada estado; la sociedad es más sensible a lo que vive, ve, lee y escucha en relación con el tema de inseguridad.

Por ello, también es importante destacar que hay seis estados en el país que han visto incrementos significativos en la criminalidad de su entidad. A pesar de que Yucatán mantiene la tasa más baja de homicidios por cada 100 mil habitantes (6 en el 2019 y 7 en el 2024) el total de homicidios en los primeros seis meses del año se ha incrementado un 55 por ciento.

El estado de Morelos ha visto un incremento del 51 por ciento en el total de homicidios cometidos en los primeros seis meses del año entre el 2019 y el 2024, de la misma manera el estado de Nayarit.

El estado de Campeche no está lejos de los casos anteriores, el total de homicidios en los primeros seis meses entre el 2019 y el 2024 se incrementó un 46 por ciento.

El quinto estado con la tasa de crecimiento más alta en el total de homicidios en los primeros seis meses del año es Nuevo León, con el 41 por ciento y finalmente el estado de Chiapas ha visto un incremento del 33 por ciento en los homicidios en estos primeros seis meses del 2024 respecto al mismo periodo del 2019.

Como podemos ver, no importa de qué manera analicemos los datos, en números totales, en tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes o solamente para los primeros seis meses de cada año, el resultado es el mismo.

Lejos de que el número de homicidios en el país se reduzca, o se mantenga constante, sigue en aumento cada año. La inseguridad está desbordada en nuestro país, y la capacidad de respuesta del Estado está preocupantemente menguada.

Pablo de la Peña

Pablo de la Peña

Decano Asociado de Educación Continua de la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno y director de la Escuela de Gobierno y Transformación Pública, profesor del Tec de Monterrey de Economía y de Gestión Pública Aplicada.

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