Revisando el informe de las finanzas públicas al segundo trimestre del año, en particular el desempeño que ha tenido el Gobierno Federal, el resultado muestra un importante aumento en el sobregiro del gasto, por arriba de la generación de ingresos propios, que elevó el déficit presupuestal del Gobierno Federal de $573.8 miles de millones de pesos en junio del año pasado, a $1,029.1 miles de millones de pesos a junio de este año, un aumento de casi 80% de un año a otro.
Este incremento en el déficit del Gobierno Federal, el cual aumentó en más de $450 mil millones de pesos, se originó básicamente por un fuerte aumento en el gasto neto, superior a los $600 mil millones de pesos, de los cuales solo unos $150 mil millones de pesos se pudieron sufragar con mayores ingresos propios, los cuales solo aumentaron en un 1.8% real, mientras que los gastos lo hicieron a una tasa del 14.2% de crecimiento real, lo que explica el aumento en el déficit por unos $450 mil millones de pesos ya comentados.
Sin embargo, para financiar el exceso de gasto sobre los ingresos propios, el cual sumó un billón veintinueve mil millones de pesos durante los primeros seis meses del año, el Gobierno Federal incrementó su deuda bruta en $1.6 billones de pesos, lo que representa un aumento de $600 mil millones de pesos, por arriba de las necesidades de financiamiento.
En efecto, desglosando el incremento en los saldos de la deuda del Gobierno Federal, entre el mes de diciembre de 2023 y el dato al mes de Junio de este año, en tan solo seis meses, el saldo de la deuda interna bruta del Gobierno Federal aumentó en $1.3 billones de pesos mientras que el saldo de la deuda bruta externa se incrementó en $308.7 miles de millones de pesos, ya que se contrataron nuevos créditos (netos de amortizaciones) por un total de $8,500 millones de dólares, y la suma del incremento total de la deuda (interna más externa) totalizó los $1,613.1 miles de millones de pesos en los primeros seis meses del año.
Si revisamos la Ley de Ingresos para este año 2024, lo que se tiene es que los ingresos por financiamientos aprobados para todo el año, a nivel presupuestal (Gobierno Federal más Organismos y Empresas) fueron de $1.7 Billones de pesos, pero considerando que los Organismos y Empresas operarán con Superávit, los ingresos por financiamientos del Gobierno Federal se estimaron en $1.9 Billones para todo 2024.
De tal suerte, en tan solo los primeros seis meses del año, el Gobierno Federal ya casi agotó la totalidad de la deuda aprobada que ocupa para financiar su déficit financiero presupuestal, quedando solo por contratar unos $400 mil millones de pesos, pero si consideramos que el Gobierno Federal también financia el déficit extra presupuestal, el margen para contratar más deuda se eleva un poco más, a $490 mil millones de pesos, conforme lo dispone el Artículo 2 de la referida Ley de Ingresos de la Federación.
Estacionalmente, el déficit en el que se incurre en el segundo semestre del año, siempre es superior al que se genera en los primeros seis meses, ya que mientras el gasto es superior en el segundo semestre del año, los ingresos son inferiores, ya que los pagos por declaraciones anuales de ISR se efectúan en Marzo y en Abril.
Entonces, es factible esperar que el déficit financiero del Gobierno Federal, a nivel presupuestal, durante el segundo trimestre del año sea superior al billón de pesos, pero tan solo tendrá disponibles para contratar unos $400 mil millones de pesos, conforme se le autorizó en el artículo 1 de la Ley de Ingresos, por lo que dese ahorita se puede estimar que el déficit financiero del Gobierno Federal sin duda alguna será muy superior a los $2 billones de pesos y que incumplirá con el techo de deuda aprobado por el Congreso.
Un sobregiro en la contratación de deuda por unos $600 mil millones de pesos, equivale a unos dos puntos como proporción del PIB, por lo que el cociente de déficit financiero a PIB pasaría de 5.9% a 7.9%, utilizando el PIB pronosticado por Hacienda para este año, pero si lo ajustamos con el menor crecimiento que viene reportando la economía mexicana, ese cociente sería superior al 8%.
Esperemos a ver qué tanto pueden apretar el gasto al arranque del nuevo sexenio, a partir del 1 de Octubre, y los resultados se puedan acercar más a las proyecciones oficiales, que por lo reportado a Junio, parece ser que no se van a cumplir.
Finalmente, con el aumento registrado a la deuda interna bruta del Gobierno Federal en los primeros seis meses de este año, se tiene que su saldo es ya de $12 Billones de pesos, mientras que al cierre del 2018, su saldo era de $6.4 Billones de pesos, por lo que en este sexenio, el aumento será muy cercano al 100%!!!!
Es decir, en tan solo este sexenio, el Gobierno Federal habrá contratado un monto igual de deuda interna, al contratado por TODOS LOS GOBIERNOS ANTERIORES, desde que se tienen registros de la deuda.
Y todavía hay quienes se creen el cuento de que esta administración NO ha aumentado la deuda.