La creciente ola de inversiones en el norte de México propiciada en gran medida por el impacto del nearshoring ha generado un mayor nivel de conciencia de las necesidades clave que requieren esos flujos de negocio transnacionales que han llegado a los estados de Nuevo León y Tamaulipas.
El tema de la aplicación de los esquemas de seguridad en un nivel estructurado y en sus diferentes capas de alcance (estratégico, táctico y operativo) es imprescindible en este canal de negocio, en esta conciencia de necesidades las responsabilidades de los actores del sector privado y las colaboraciones entre ellos juegan un papel importante para que los esfuerzos del gobierno se vean fortalecidos en la mayor medida posible.
La implementación de los esquemas de seguridad toma mayor trascendencia de impacto; es por tanto, que la migración a modelos de seguridad corporativa enfocados a la gestión de riesgos y la continuidad del negocio resultan apreciados, y en algunos casos, hasta exigidos por estos “big players internacionales” que entran en este canal del nearshoring. El reto para la implementación de estos modelos no solo son las adversidades posibles que tiene el escenario mismo donde corren las estrategias, el impacto del costo en la rentabilidad que implica la implementación, sobre todo en la parte operativa donde la exposición al riesgo es mayor, sino también el entendimiento pleno y adopción de este requerimiento por parte de los liderazgos locales que representan la plataforma de soporte local en instalaciones y servicios de proveeduría.
La seguridad tradicionalmente venía incorporándose como un factor obligatorio, sin aportación activa, más allá del cumplimiento del requerimiento, siendo visible únicamente en los incidentes de impacto a los intereses del negocio, y mientras tanto, como una constante de gasto en el flujo operativo… Hoy el actual escenario (evolutivo constante) requiere otro nivel de incorporación.
A manera de ejemplo, y en este entendimiento de necesidad y oportunidad de la seguridad, un grupo de empresarios clave de la región fronteriza del norte de México (Tamaulipas) y de Estados Unidos (Sur de Texas) han considerado y sumado este vital factor a un importante proyecto binacional de negocio llamado RioPlex.
El proyecto de RioPlex es impulsado no solo por el sector empresarial privado sino también por las mismas autoridades de la región, con este esfuerzo se busca proyectar de manera unificada y con estrategia todas las ventajas competitivas incluyendo el factor seguridad como un “key point” con las que se busca atraer en un esquema factible y seguro de negocios: la inversión, desarrollos y prosperidad a toda la zona. La cobertura de este esfuerzo binacional abarca en los Estados Unidos al sur de Texas desde la ciudad de Roma a Brownsville y del lado de México en el norte de Tamaulipas de la Ciudad Mier hasta Matamoros.
El desarrollo de plataformas como RioPlex, donde la seguridad sea un componente esencial y competitivo, son imprescindibles para que México aproveche al máximo estas olas de oportunidades en los negocios globales.
Index Nuevo León, receptivo a esta necesidad de contar con un modelo de seguridad, ha lanzado para sus afiliados desde el pasado mes de marzo de 2024 un Subcomité de Gestión de Riesgos en Cadena de Suministros. En este espacio Index ha agrupado a varias empresas que a través de sus representantes en un equipo de profesionales multidisciplinarios, identifican y agrupan los temas de seguridad que ponen en riesgo la continuidad de la cadena de suministros. En este Subcomité se sesionan las posibles estrategias de gestión, estructurando de manera sólida y conjunta las necesidades de los asociados, buscando beneficios puntuales y de impacto positivo a las empresas, siendo muchas de estas, actoras clave en esta ola de inversiones empujada por el nearshoring.
El autor es Miembro del Subcomité de Gestión de Riesgos en la Cadena de Suministros de Index Nuevo León.