México se ha posicionado como uno de los destinos clave para la reubicación de empresas, sin embargo, existen inversiones que no se han consolidado a causa de los retos en términos de regulación, energía, infraestructura y certidumbre que el país aún no ha logrado resolver.
La esperanza está en la conexión y colaboración con Estados Unidos, y en el caso del noreste de México, en su integración con Texas. 16 puertos marítimos, 27 aeropuertos comerciales, 226 universidades y colegios, Estado líder en exportación y en “Fortune 500″ empresas, explica por qué Texas se ha convertido en una potencia inigualable en la economía global.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, anunció recientemente una inversión récord de 142 mil millones de dólares en infraestructura de transporte.
Parece que Texas ofrece a las empresas las mejores condiciones de hacer negocio a nivel nacional e internacional, con una estructura regulatoria justa y transparente, diseñada para que las compañías y el comercio triunfen.
Abbott celebró la semana pasada que Texas es el líder en materia de empleos del país tras la publicación de los datos de empleo de agosto, que muestran un aumento en los empleos en Texas, con 78 mil empleos añadidos durante el mes y 302 mil empleos añadidos durante los últimos 12 meses.
“Texas sigue liderando la nación en innovación y creación de empleos”, dijo el gobernador Abbott. “La rica diversidad de nuestro Estado es la base de nuestra competitividad. Texas es el motor económico de Estados Unidos, y la mayor parte de eso fue posible gracias a nuestras empresas propiedad de hispanos. Las empresas hispanas son un impulsor clave de la economía de Texas, ya que Texas alberga al 20 por ciento de los propietarios de empresas hispanas de Estados Unidos”.
México, y en especial los estados fronterizos Nuevo León, Coahuila, Tamaulipas y Chihuahua, pueden ayudar a Texas a convertirse en la economía más grande en EU.
Es necesario que Monterrey y Saltillo sean ciudades aún más conectadas con Texas, fortaleciendo de forma contundente las relaciones e inversiones empresariales. Existen ya muchos acuerdos entre asociaciones y funcionarios, pero lo importante es que haya aún más relacionamiento concreto sobre oportunidades y proyectos de negocio.
Es una gran responsabilidad de unir fuerzas y apoyar a crear la región más competitiva del planeta. Suena muy ambicioso, pero es una realidad y una oportunidad nunca antes vista. La visión consiste en crear una región de innovación e inversión abierta de forma masiva. Hay que innovar y desarrollar el comercio mexicano-tejano en las industrias tradicionales y del futuro.
Los conceptos “pro-business”, “pro-education” y “small-government approach” se conectan con innovación e inversión abierta, donde la migración de talento calificado es otro punto crucial.
Las nuevas metas de aumentar el comercio y las inversiones de la IP generarán una nueva zona mexicana-tejana mucho más fortalecida.
En mi opinión, será la zona de comercio, negocio, innovación y talento más importante durante los siguientes 20 años. La semana entrante hay tres eventos muy clave donde se reúnen tomadores de decisión y líderes para conectar los entes.
En la Ciudad de México se celebrará el “North Capital Forum 2024″ de la “US-Mexico Foundation” liderado por Emilio Cadena y Enrique Perret.
El mensaje principal será “Come Together - The North American Way”. En Dallas, o más bien en Arlington, en el estadio AT&T de los Dallas Cowboys, se organiza el “YTexas Summit” de Ed Curtis, donde una delegación de México y Nuevo León busca conectarse con los temas de manufactura, tecnología, aeroespacial, capital humano, infraestructura, deporte y entretenimiento.
El “YTexas CEO Roundtable” unirá varios alcaldes de Texas, directivos de empresas, líderes de EDCs (Economic Development Centers) y los “Sports Commissioners” de Houston y Dallas para el tema del Mundial de la FIFA en 2024. Otro evento tradicional e importante en la agenda de la capital tejana durante octubre es el “Austin City Limits”, el festival de música que reúne a más de 400 mil personas en dos fines de semana.
Manos y mentes a la obra y, como siempre les digo, “better together”. Si queremos cambiar las cosas para bien, tenemos que provocar nuevas conversaciones y al final del día “we have to show up”.
La generación de mayor confianza y colaboración entre la triple hélice a nivel transfronterizo cambiará nuestro destino para un mejor mañana.