La competitividad de la economía de un país o una región no puede reducirse únicamente a su PIB y productividad. La mentalidad, los valores, las dimensiones políticas, el avance social y la cultura también son una realidad de una región. Los gobiernos en sus niveles municipales, estatales y federales desempeñan un papel crucial al proporcionar un entorno caracterizado por una infraestructura, instituciones y políticas eficientes que puedan fomentar la creación de valor sostenible por parte de las empresas. Hoy en día, no podemos crear ciudades, estados y países exitosos sin contemplar una colaboración como región o sin adoptar las innovaciones que transformarán las industrias y los mercados.
A nivel país, Singapur es la economía más competitiva de 67 países en las ocho principales regiones del mundo. Este es el hallazgo del Ranking de Competitividad Mundial 2024 del “Centro Mundial de la Competitividad IMD”. Suiza ocupó el segundo lugar y Dinamarca el tercero. Los tres países están en el top 5 en la categoría de “Eficiencia de Negocio en términos de innovación, rentabilidad y responsabilidad”. Son ecosistemas que adoptan la innovación mejor que nadie en un ambiente con un Estado de derecho y una certidumbre de inversiones en el futuro.
La Inteligencia Artificial se volverá el nuevo estándar y puede aumentar la productividad de todo un país o un sector en específico, pero implementarla tiene su desafío. Una vez entendiendo el alcance, beneficio y uso de la IA en múltiples industrias, va a ser un “game changer”, en especial para regiones y ciudades que sepan integrarse y liderar en este nuevo mundo.
La creación de empresas y regiones inteligentes depende de su ecosistema. De hecho, el IMD mide también un índice de Ciudades Inteligentes. Pero llevémoslo mejor siempre a nivel región. El reto para una región es crear un liderazgo y un enfoque equilibrado entre múltiples ciudades en los aspectos económicos y tecnológicos inteligentes, por un lado, y las “dimensiones humanas” (valores, familias, calidad de vida, medio ambiente e inclusión). La innovación, el comercio, el talento humano, enfoque a calidad, el cuidado del medioambiente y finanzas sanas son cruciales para lograr una sostenibilidad.
Como lo menciono en cada foro, el nivel de desarrollo de las PyMEs es un punto esencial para ser competitivo como región. Las empresas alemanas del “Mittelstand” eran y aún son la razón del motor económico de Alemania, que son PyMEs exportadoras que tienen el mejor y más vendido producto en el mercado.
El programa de “Small & Medium-sized Businesses Development Centers” en Texas fomenta la fortaleza de los negocios y su constante desarrollo es esencial para la competitividad. Es también importante que a nivel valores, como lo escribo en mi libro “El Sueño Mexicano”, vayamos a tener cuidado de ideologías que atacan la esencia de cualquier sociedad: la familia.
Familias y matrimonios con valores morales son una base fundamental de un país o de una región. Pensando dónde encontramos estos elementos, se tiene que voltear a la región del “Nuevo Texas”, que es la región de Texas con sus estados fronterizos hacia el sur que son: Nuevo León, Coahuila, Tamaulipas y Chihuahua. Valores de ahorro, trabajo, productividad, valores familiares y universidades de clase mundial, como la Universidad de Texas, el Tec de Monterrey, Texas A&M, Rice University, la UANL, Dallas College, Austin & Houston Community College, son algunos de los ejemplos, donde unimos cerca de un millón de estudiantes inscritos cada año, con mucho enfoque a las carreras de “STEM”.
En este sentido, nos llegó una excelente noticia con el nombramiento de Juan Pablo Murra como nuevo Rector del Tec de Monterrey que dará un nuevo impulso sobre el desarrollo para la Inteligencia Artificial en el aprendizaje y así compitiendo para consolidarse como la plataforma educativa más relevante en lengua hispana.
La esperanza está en la innovación, conexión y colaboración dentro de esta región. Rogelio de los Santos, quien inventó el término “Nuevo Texas”, en su rol como inversionista y como consejero de la UT Austin y del Tec de Monterrey juega también un rol fundamental en este entorno. Emilio Cadena ha sido otra pieza clave de empujar y liderar las relaciones bilaterales y de negocio entre Estados Unidos y México. Necesitamos la suma de líderes en ámbitos federales y locales que colaboran con una visión integral para crear regiones competitivas donde luchamos también por el medioambiente, la seguridad y la calidad de vida de las personas.
El regionalismo, en su mejor versión, convertirá al “Nuevo Texas” en la mejor y más competitiva región del mundo. Como dato adicional estamos hablando de una región de 45 millones de habitantes con Texas teniendo 30.3 millones, Nuevo León 5.8, Chihuahua 4, Coahuila 3.1, y Tamaulipas 3.5.
Monterrey va a ser del mismo tamaño que Houston y Dallas. La Sultana del Norte va a ser una “mega-city” con más de 10 millones de habitantes y su conexión con Texas lo hará posible. Muy importante también son todas las ciudades fronterizas hablando de Matamoros, Brownsville, McAllen, Reynosa, Cd. Juárez y Laredo. Debemos en esta nueva región respetar nuestra historia común y fomentar el desarrollo económico, una educación de primer mundo y crear la infraestructura adecuada para liderar el futuro en un ambiente donde respetamos de nuevo el medioambiente y la creación de familias. El noreste de México puede ayudar a Texas a convertirse en la economía más grande en EU.
Es necesario que las ciudades de ambos lados sean aún más conectadas, fortaleciendo de forma contundente las relaciones e inversiones empresariales. Los conceptos “pro-business”, “pro-education” y “small-government approach” se conectan con innovación e inversión abierta, donde la migración de talento calificado es otro punto crucial. Las nuevas metas de aumentar el comercio y las inversiones de la IP generarán una nueva zona mexicana-tejana mucho más fortalecida.
En mi opinión, el “Nuevo Texas” será la región de comercio, negocio, innovación y talento más integral y competitiva a nivel mundial durante los siguientes 20 años. Al final del día se trata de crear una comunidad fuerte y un ecosistema holístico. Amigos de Texas y México, exactamente en esto me van a encontrar aportando en los siguientes 20 años. ¡Les invito a sumarse! ¡Hagamos equipo!