Texas, la octava economía más grande del mundo, sigue siendo uno de los mercados más sólidos y diversos a nivel global. En términos del PIB nacional, Texas produce el 9 por ciento del PIB total y el 10 por ciento del PIB manufacturero.
En nivel de energía, Texas lidera la producción de “Oil & Natural Gas” y realiza el 75 por ciento de la producción petroquímica del país. Sí, Texas tiene un liderazgo hablando de temas de energía y logística, demás, es un referente en creación y exportaciones de tecnologías.
Desde empresas emergentes hasta compañías consolidadas, las empresas tecnológicas de Texas se encuentran entre las más activas y exitosas del mundo.
Entre ellas se encuentran compañías como Tesla, SpaceX, AT&T, Dell, HP, Oracle, Indeed y Texas Instruments, por no mencionar a los/las emprendedores/as que ahora están creando las tecnologías revolucionarias del mañana y prosperando en el ecosistema de innovación de Texas.
En el sector de semiconductores, el gobernador Greg Abbott anunció durante noviembre que la subvención del Fondo de Innovación de Semiconductores de Texas se otorgó a Intelligent Epitaxy Technology, Inc. (“IntelliEPI”) para su nueva planta de producción de “silicon wafers” (obleas de silicio) de 30.000 pies cuadrados en Allen, Texas. El proyecto, que es parte del “Texas CHIPS Act” que se promulgó el año pasado, estima triplicar la producción anual de obleas de la empresa.
Otra señal positiva es que el empleo en Texas crece con fuerza, en especial en los sectores de turismo, manufactura, actividades financieras y construcción. Texas ha sido el líder en todo Estados Unidos acerca de empleos creados en los últimos 12 meses.
Según los datos de empleo de la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos, Texas agregó 274 mil empleos no agrícolas entre octubre de 2023 y octubre de 2024, mucho más que cualquier otro Estado. Hasta octubre 2024, Texas ha agregado más de 2.4 millones de empleos bajo el liderazgo del gobernador Abbott. “Texas es el lugar donde se está construyendo el futuro de Estados Unidos”, enfatiza el gobernador Abbott.
“Con el mejor clima empresarial del país y una fuerza laboral capacitada y en crecimiento, Texas es el lugar donde los empresarios y las empresas innovadoras encuentran la libertad y las herramientas necesarias para tener éxito. Como resultado, los tejanos están trabajando más que nunca, y eso significa más oportunidades para que más familias tejanas prosperen. Con inversiones continuas en educación y capacitación de habilidades, seguimos construyendo un Texas más grande y mejor para todos”.
Ciertamente, el éxito del Texas se explica en gran medida también por su exportación, teniendo casi un tercio de la exportación nacional en valores absolutos, con más de la mitad procesados en la zona fronteriza con México. Texas es la entidad más conectada con México por su intercambio de bienes y servicios con más del 30 por ciento de todas las exportaciones de Estados Unidos a México, proviniendo de Texas.
Para los sectores aeroespaciales y logísticos el crecimiento de Brownsville es el mejor ejemplo. El alcalde de Brownsville, John Cowen, mencionó las recientes inversiones de SpaceX de 3.2 mil millones de USD para su infraestructura de “Starbase” y de más de 20 mil millones para nuevos terminales de gas “LNG” en el puerto de Brownsville. María Elena Orantes, Cónsul General de México en Houston, anunció recientemente que el comercio entre Houston y México superó los 22 mil millones de USD en la última década.
A niveles relaciones comerciales entre Estados Unidos, en especial Texas, con México, es importante señalar que México no está preparado para un conflicto comercial y debe colaborar para seguir siendo el socio comercial más importante de aliado del T-MEC (USMCA en inglés, tratado entre México, Estados Unidos y Canadá).
Para la competitividad regional, el funcionamiento y el suministro en forma y tiempo de las cadenas de producción en toda América del Norte son esenciales.
El futuro del T-MEC dependerá de las decisiones que tomen México y Canadá en visualizar y alinearse con Estados Unidos. A nivel región, debemos dar certidumbre a la inversión y el comercio en la región.
Parece que la renegociación del T-MEC se adelantará y es clave tener asesoría acertadas de cámaras de comercio para con el gobierno federal en este proceso, en específico en los temas relacionados con comercio, servicio, migración laboral y turismo.
Al final, la política influye fuertemente en el desempeño económico. A México espera una etapa incierta a corto plazo, pero la integración, exportación y colaboración para con Estados Unidos sigue siendo prioridad.
En términos de economía, Texas seguirá mandando la pauta para construir un “mejor futuro”. Los factores incluyen: un sólido legado de ingeniería y tecnología, acceso a financiamiento y capital de riesgo, costos competitivos operativos, bajo costo de vida, una fuerza laboral fuerte y talentosa, y un clima favorable a los negocios, siendo “pro-business”.
Es un modelo integral que sigue funcionando, combinando nuevas tecnologías con un comercio tradicional. Elon Musk también seguirá impulsando e invirtiendo en Texas. Y seguramente es tanto por el ambiente de negocio y por ser un estado conservador en términos de principios y valores. Con la noticia que a nivel educativo se acaba de aprobar la semana antepasada, el plan de estudios llamado “Bluebonnet Learning”.
Un nuevo plan de estudios basado en la Biblia para las escuelas primarias, donde los maestros tendrán la opción de optar por un aprendizaje en la fe. Los defensores del nuevo plan enfatizan que las referencias al cristianismo proporcionarán a los estudiantes una mejor comprensión de la historia del país y del Estado. Texas, el modelo a seguir.