Tras señalar el viernes pasado por la tarde que cumplía con las normativas de control ambiental que fijan las autoridades, la operación de la empresa regiomontana Zinc Nacional fue clausurada temporalmente al mediodía del sábado por la Procuraduría Federal de Protección Ambiental (PROFEPA).
La denuncia inicial provino de una investigación periodística realizada por Quinto Elemento Lab y el diario británico The Guardian. Estos reportajes presuntamente revelaron niveles alarmantes de contaminación en el área de San Nicolás, lo que llevó a las autoridades a tomar medidas de seguridad y a iniciar una inspección más exhaustiva.
Apenas el viernes por la tarde la empresa emitió su postura: “
“En relación con señalamientos recientes que se derivan de un estudio del cual Zinc Nacional no ha tenido acceso,…la empresa se encuentra trabajando en coordinación con la Secretaría de Medio Ambiente de Nuevo León, de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social y la Secretaría de Salud de Nuevo León y el Municipio de San Nicolás para revisar y proporcionar información relacionada con los criterios en materia de emisiones, manejo responsable de los insumos de nuestra industria y sus residuos, así como las condiciones de salud y seguridad para los colaboradores y las comunidades cercanas”.
Indicó que Zinc Nacional reporta periódicamente información sobre las emisiones de nuestra planta en San Nicolás, los controles de salud de nuestros colaboradores, así como parámetros sobre el suelo, agua y aire tal como son solicitados por las distintas autoridades correspondientes.
“En relación con las emisiones de SOX, se precisa que el dato que circula en medios es 47 veces mayor a la cifra real que reporta Zinc Nacional al Inventario de Emisiones del CAI (Clear Air Institute). Las gestiones con la Secretaría de Medio Ambiente para corregir esta imprecisión se realizan desde agosto 2023”, señaló la empresa.
La supervisión de las autoridades estatales y federales, así como las distintas auditorías que realizan de manera independiente clientes, proveedores y certificadoras internacionales, dan cuenta del cumplimiento de Zinc Nacional con la regulación aplicable y la implementación de estándares internacionales con los que operamos.
Consultado sobre el tema, el especialista ambiental y consultor industrial, Ernesto Rodríguez Pereira, advirtió que, “el polvo de zinc en el aire que respiramos puede ser peligroso, especialmente en concentraciones elevadas. Estos son los efectos principales desde una perspectiva química y toxicológica, y puede causar irritación en la nariz, garganta y pulmones si es inhalado. Los síntomas incluyen tos, dificultad para respirar y malestar en el pecho.
“Si el polvo de zinc es calentado o convertido en humos metálicos (por ejemplo, durante soldadura o procesos industriales), puede causar una condición conocida como fiebre de los humos metálicos. Esta condición se caracteriza por síntomas similares a la gripe: fiebre, escalofríos, dolores musculares y fatiga. Aparece típicamente varias horas después de la exposición”.