Este 11 de octubre se celebra el Día Internacional de la Niña. Te explicamos por qué y con qué objetivo se festeja:
El 19 de diciembre de 2011, la Asamblea General de Naciones Unidas declaró el 11 de octubre como el Día Internacional de la Niña con el objetivo de reconocer sus derechos, así como los problemas excepcionales que confrontan en todo el mundo.
La declaratoria parte de la idea de que las niñas y las adolescentes tienen derecho a una vida segura, educada y saludable, no solo durante estos años críticos de formación, sino también a medida que maduran y se convierten en mujeres.
“Si reciben apoyo efectivo durante la adolescencia, las niñas tienen el potencial de cambiar el mundo, tanto como niñas empoderadas de hoy como trabajadoras, madres, emprendedoras, mentoras, jefas de hogar y líderes políticas del mañana”, señala el sitio web de Naciones Unidas.
Lo que se busca con esta fecha es trabajar para que todas las niñas y adolescentes tengan más oportunidades de aprendizaje, para trazar nuevos caminos para ellas y hacer un llamamiento a la comunidad mundial para pensar cómo prepararlas para que entren con éxito en el mundo laboral.
La visión para el 2030 bajo el tema de “El poder de las adolescentes”, es que las agencias de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), los Estados Miembros, las organizaciones civiles, el sector privado y otros interlocutores sociales busquen poner a las niñas en el centro de los esfuerzos del desarrollo sostenible, llevando a cabo iniciativas claves para el presente y el futuro. Entre dichas iniciativas destacan las siguientes, según la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH):
- Invertir en educación de calidad, formación, capacitación, acceso a la tecnología y otras iniciativas educativas que preparen a las niñas para la vida, el trabajo y el liderazgo.
- Invertir en salud y en una nutrición adecuada durante los años de adolescencia, incluyendo la educación sobre la pubertad, la higiene menstrual, la salud reproductiva y sexual y la disposición de esos servicios.
- Promover la no aceptación de la violencia física, mental o sexual bajo ningún concepto.
- Habilitar mecanismos sociales, económicos y políticos para combatir el matrimonio infantil y la mutilación genital.
- Invertir en la creación y mantenimiento de espacios púbicos para el debete cívico y político, la creatividad y la mejora del talento.
- Promover legislaciones y políticas de género en todas las áreas, especialmente para las adolescentes discapacitadas, vulnerables, marginadas y víctimas del tráfico y la trata.