Andrew Pollard, uno de los expertos que ayudó a crear la vacuna contra el COVID-19 de Oxford-AstraZeneca, aseguró que “no es sostenible” aplicar a todos los habitantes del mundo una dosis de refuerzo cada seis meses.
“No podemos vacunar al planeta cada cuatro o seis meses. No es sostenible ni asequible”, sostuvo en una entrevista para el diario The Daily Telegraph.
El científico también destacó la “necesidad de dirigirse a los más vulnerables”, en lugar de administrar vacunas a los mayores de 12 años. Por ello, hizo un llamado para no olvidar la desigualdad que ha existido en la repartición de vacunas en el planeta.
“Hay que recordar que, hoy en día, menos del 10 por ciento de las personas de los países de bajos ingresos ha recibido siquiera su primera dosis, por lo que la idea de una cuarta dosis regular a nivel mundial no es sensata”, recalcó.
Pollard explicó que se necesitan más datos para determinar si las personas vulnerables necesitan dosis adicionales y con qué frecuencia”. Además, se mostró optimista al referir que “lo peor ya ha pasado” y el mundo sólo tiene que pasar “el invierno”.
Israel es uno de los países que ya ha comenzado a desplegar una cuarta dosis a personal médico y a personas mayores de 60 años, mientras que Alemania dio a conocer que los ciudadanos “necesitarán una cuarta vacuna” contra el coronavirus.