Las nuevas autoridades de Jersón, una ciudad ubicada en el sur de Ucrania controlada por tropas rusas, planean solicitar al presidente Vladimir Putin su anexión a Rusia, confirmó el Kremlin este miércoles.
Esta “petición” es la primer señal pública de posibles anexiones de territorio ucraniano a Rusia tras la invasión que comenzó el pasado 24 de febrero.
Kirill Stremousov, administrador de la región impuesto por Rusia tras la toma de la ciudad, afirmó que no tienen previsto autoproclamarse “República Popular de Jersón”, como lo hicieron las regiones de Donetsk y Luhansk.
En cambio, afirmó, planean pedirle a Putin que incorpore la región al país.
“La ciudad de Jersón es Rusia”, dijo Stremousov en entrevista. “No habrá referéndums. Habrá un decreto basado en el pedido del liderazgo regional de Jersón al presidente ruso, y habrá una petición para incluir a la región dentro de una región de la propia Federación Rusa”.
La toma de Jersón, una ciudad colindante con Crimea y el Mar Negro, ha sido posiblemente el mayor logro del Kremlin en el conflicto.
En la ciudad, las autoridades prorrusas ya están negociando la apertura de un banco ruso, cuyas filiales podrían aparecer en la región a finales de mayo.
Habitantes de Jersón decidirán anexión
El destino de la región ucraniana de Jersón, controlada por tropas rusas, lo deben decidir los habitantes de ese territorio, declaró este miércoles el Kremlin.
”Son los habitantes de la región de Jersón los que deben decidir si habrá o no una solicitud (de ingreso)”, dijo el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa diaria.
A la vez, aseguró que la posible solicitud de ingreso debe ser evaluada “de una manera exhaustiva” por los juristas.
”Estas decisiones decisivas deben tener un trasfondo legal absolutamente claro, una justificación, ser absolutamente legítimas, como fue el caso de Crimea”, donde en 2014 se celebró un referéndum, dijo el portavoz de la Presidencia rusa.